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La reapertura al público de Tecnópolis comenzó con un acto, en el parque didáctico Zamba, presidido por el ministro de Educación, Alberto Sileoni.

Luego de recorrer la calle principal del parque, el funcionario llegó al sector donde lo aguardaba la fanfarria militar Alto Perú, del Regimiento de Granaderos a Caballo. Dijo que ese espacio “está concebido para los más chicos y concita su interés por la historia”. En esa zona, los chicos juegan cerca de los símbolos nacionales: la Bandera creada por Belgrano, el Cabildo, la Casa de Tucumán.

Sileoni señaló que para los adultos está “el espacio Patria Tecnópolis, que está dedicado a los jóvenes, la tecnología, la ciencia, las netbooks, y la posibilidad de hacer, con toda esa tecnología que estamos distribuyendo en las escuelas, cosas muy motivadoras”. Dijo que este año procurarán llegar a “unos 140.000 estudiantes de todo el país, que el año pasado fueron casi 100.000, a través de la demanda de las escuelas y cupos por provincia, porque queremos que no sólo los chicos de la ciudad o los bonaerenses más próximos puedan acercarse”.

El secretario de Legal y Técnica de la Presidencia, Carlos Zannini –de quien depende la organización de Tecnópolis– declaró a su vez que una de las mejoras importantes de esta segunda edición “es la participación de la actividad privada, con más de 120 empresas” formando parte de la muestra.

“Es importante recalcar, como dijo la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que en Argentina y Latinoamérica, la energía, los alimentos y la ciencia y la tecnología son los desafíos que vamos a tener en el futuro para vivir dignamente, con inclusión y justicia”.

El funcionario agregó que la modalidad de participación privada se resolvió a través de las cámaras que “presentaron proyectos que no tienen que ver con vender nada ni hacer publicidad de marca, sino que se muestra lo que cada empresa hace en desarrollos científicos para su actividad en la Argentina”. Están incluidas “muchas automotrices, embajadas, empresarios del software, la hidrovía, mostrando maquinarias en sus espacios, cuyos costos fueron cubiertos” por las empresas privadas.