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Lorena Parodi tiene 16 años. Hasta hace algunos años, recuerda, era una “adicta” a la televisión. “Veía unas seis horas por día, porque la tele es atrapante y funciona como una niñera electrónica. Hoy estoy viendo muy poco, a lo sumo dos y no todos los días”, contó. Desde hace cuatro años, Lorena es presidenta de TV La Familia, una entidad integrada por chicos y adolescentes que se dedica a analizar la calidad de la programación de la pantalla chica y a recorrer colegios para sugerirles a los alumnos actividades de entretenimiento alternativas a la tele. “Hemos llegado a detectar chicos que ven hasta 9 horas por día”, comentó a Página/12. “Los nenes más chiquitos nos dicen que cuando sus papás quieren conversar, los mandan a ver dibujitos para estar tranquilos”, agregó.
Cuando van a las escuelas, les proveen a los chicos un cuestionario para reflexionar sobre la cantidad de horas que pasan frente a la TV y después les proponen 101 actividades para el tiempo libre, entre artísticas, deportivas y culturales. “Casi todos ven de cuatro horas en adelante por día. A los chicos y a los jóvenes nos atrapa muchísimo porque es una forma de entretenimiento en la que no hay que hacer mucho esfuerzo”, señaló.