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Unos 240 economistas, en su mayoría cercanos al Partido de los Trabajadores (PT) de Luiz Inácio Lula Da Silva, elaboraron un documento con duras críticas a la política económica aplicada por el presidente brasileño. “Ayudamos al gobierno Lula a formular las propuestas para que el PT llegue al poder, y ahora percibimos que la política aplicada apunta más a satisfacer al mercado que a los intereses de la población”, aseguró el economista Plinio de Arruda Sampaio Jr., uno de los firmantes del texto. El documento, titulado “La agenda interdictada. Una alternativa de prosperidad para Brasil”, propone medidas opuestas a las aplicadas hasta ahora por el ministro de Hacienda, Antonio Palocci. Los economistas quieren que se implementen un control de cambio y de capitales externos, además de la reducción del superávit primario y de las tasas de interés.
“Brasil está siendo llevado a un callejón sin salida de recesión, inflación y desempleo, por una política económica que capituló ante la insensatez del totalitarismo de mercado”, advirtieron los economistas en el escrito.
“Con más de una década en que el experimento neoliberal viene siendo practicado en Brasil, es hora de cuestionarse: ¿hasta cuándo el crecimiento con redistribución de ingresos será negado a la sociedad brasileña?”, agregó el documento. Los economistas petistas propician aumentar el gasto público, “con prioridad en la ampliación de los servicios de educación, salud, seguridad, asistencia y vivienda, que generan muchos empleos”. El documento defendió además, la promoción de inversiones públicas en infraestructura, el mantenimiento y ampliación de la política de incentivo a las exportaciones, la sustitución de importaciones, y una política de ingresos pactada para controlar la inflación.