Desde Londres

Peter Gabriel acaba de plantar la semilla de un viejo sueño. El fundador de Womad y ex cantante de Genesis quería crear una comunidad de músicos con acceso directo al público, y va camino de conseguirlo. Acaba de lanzar We7, un servicio de descargas audiovisuales gratuitas, sin sistema de protección intelectual y sostenido por anuncios publicitarios. El nuevo sitio de Internet (www.we7.com) funciona como plataforma de despegue de artistas o bandas emergentes y como centro de distribución para los músicos establecidos. Debutantes y veteranos regalarán sus trabajos creativos sin renegar de sus derechos de autor. Cobrarán sus respectivos “royalties” de los beneficios de la inversión publicitaria, que We7 tiene previsto repartir equitativamente. El consumidor también se beneficia de la operación. No pagará un centavo por bajarse canciones, videos o discos enteros. Los ficheros digitales tampoco llevarán un programa de protección anticopia, los llamados DRM, de forma que los podrá reproducir en un aparato MP3 y grabarlos en un CD. “El único ‘costo’ es escuchar anuncios, lo cual la gente hace continuamente en la radio comercial”, explica Gabriel. El minuto aproximado de mensaje publicitario se “injertará” delante del inicio de la canción y, gracias a una sofisticada técnica, quedará allí “pegado” unas cuatro semanas después de su descarga de Internet. We7 canalizará los productos del anunciante de acuerdo con el perfil demográfico del usuario, principalmente en función de su edad, género y ubicación. “Así, la publicidad será más útil y digerible”, comenta el cantante.

Gabriel siempre apostó por las nuevas tecnologías, creativa y financieramente. En 1999 fundó uno de los primeros servicios de descargas digitales, OD2, propiedad hoy de Nokia. Ahora se hace eco de la reticencia de muchos a pagar de más por un CD, que pueden bajar de Internet o grabar a partir del ejemplar de un amigo. “La mayoría de los menores de 30 no pueden o no quieren pagar por una grabación musical ‘on line’. Es una realidad que todos los artistas –incluido yo mismo– debemos aprender a aceptar y a adaptarnos”, advierte el autor de “Sledgehammer”.

We7 enfoca su servicio hacia un amplio abanico de la población mundial, entre 14 y 65 años. Invita a sus suscriptores a participar de lleno en la operación ejerciendo de “tastemakers”, es decir, de críticos de las canciones de grupos aún no fichados por la industria. También podrán valorar la calidad de artistas establecidos en sus incursiones por estilos no habituales en su trayectoria creativa. La web ya está operativa, aunque aún falta por clasificar los bandas que se subirán a la revolución de Gabriel, que dirige a nivel práctico un gurú de la alta tecnología, el empresario Steve Purdham.

* De El País de España. Especial para Página/12.