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9

EL VIAJE DE CHIHIRO

De Hayao Miyazaki.
2001, 125 min.
SBP.

Se reedita una de las obras mayores del sensei de la animación japonesa. Como una Alicia de ojos rasgados, la protagonista accede a una realidad alterna, huyendo de unos padres que, producto de la gula, acaban de convertirse en un horrible par de cerdos. En una casa de baños mutante, Chihiro descubrirá un mundo en el que lo maravilloso y lo monstruoso, el sueño y la pesadilla son caras de una misma moneda. Miyazaki reconstruye ese mundo imaginario con asombroso despliegue visual, alcanzando dimensiones maniáticas en su culto del detalle. Aunando la más tradicional técnica manual y la más sofisticada digitalización de punta, Miyazaki consuma un verdadero hito de la animación contemporánea.

7

LLUVIA DE HAMBURGUESAS

De Phil Lord y Chris Miller.
Voces de Bill Hader y Anna Faris. 2009, 90 min.
Sony Pictures.

Pixar no está solo. Confirmación de que el cine de animación es el último reducto de libertad creativa que queda en Hollywood, Lluvia de hamburguesas es una de esas películas que hay que ver para creer. O disfrutar, o valorar. Contada, parece una estupidez: un inventor tan entusiasta como inexperto pergeña una máquina para fabricar comidas preparadas, pero su torpeza provoca el fenómeno meteorológico del título. Y eso es todo, amigos. O mejor dicho, eso no es nada. Porque lo que importa es que los guionistas, realizadores y animadores de esta película están tan locos como el protagonista. Locura que los lleva a hacer de pizzas, bifes y donuts algo parecido a las frutas y verduras de Arcimboldo... pero a escala cósmica.

6

IDENTIDAD SUSTITUTA

De Jonathan Mostow.
Con Bruce Willis y Radha Mitchell. 2009, 89 min.
Disney Argentina.

Una película no del todo lograda, pero no por ello poco interesante. El título hace referencia a los “dobles mejorados” (avatares, podría llamárselos) que cualquier hijo de vecino puede adquirir en el futuro, y que permiten “corregir” arrugas, kilos, calvicie y falta de músculos, sin necesidad de recurrir a molestas cirugías. El doble de Bruce Willis –rubio, bronceado, de mechón sobre la frente– debe investigar una serie de crímenes, parte de una gigantesca conspiración industrial. La trama policial es una paparruchada, pero la agudeza de la idea central, el sentido del humor implícito y la buena mano del realizador Jonathan Mostow (el de la vituperada y excitante Terminator 3) permiten que el interés no se diluya.

MEDIANOCHE EN EL JARDIN...

De Clint Eastwood.
Con Kevin Spacey,
John Cusack y Jude Law. 1997, 155 min. AVH.

AVH editó recientemente esta rareza en la obra de Clint Eastwood. Fábula sobre la representación, las apariencias, la imposibilidad de conocer la verdad y el “relájate y goza”, Medianoche en el jardín del bien y del mal se basa en la investigación que un periodista neoyorquino (John Cusack) hizo sobre un caso de asesinato en la alta sociedad de Savannah, Georgia, con un millonario excéntrico y bon vivant (Kevin Spacey) y su chofer y chongo (Jude Law) por protagonistas. Larga, sinuosa y llena de espejismos, Medianoche... incluye la presencia de una bruja vudú y una drag queen negra, que tal vez sean las únicas en decir la verdad. La banda sonora incluye temas de Johnny Mercer, ciudadano emérito de esa ciudad.