Una de cada diez estudiantes sufrió abuso sexual, según un relevamiento entre 2750 estudiantes de universidades públicas y privadas de Capital Federa, en el marco del proyecto de investigación “Experiencias traumáticas en infancia y adolescencia”, de UBACyT/UBA, llevado adelante por María Inés Bringiotti, Carla Del Duca y María Florencia Guillem. El 12 por ciento de las victimas son mujeres y el 6 por ciento varones. El 7 por ciento de la violencia sexual se cometió en un coito forzado, el 9 por ciento en acoso sexual, el 11 por ciento en sexo oral, el 28 por ciento en propuestas de índole sexual y el 70 por ciento en manoseos, aunque muchas victimas sufrieron más de una forma de abuso sexual.

El 44 por ciento sufrió abuso sexual una vez, el 33 por ciento entre dos y cuatro veces, el 13 por ciento entre cinco y nueve veces y el diez por ciento más de diez veces. El 68 por ciento de los abusadores estaba en contacto con la victima y el 32 por ciento eran extraños. El 26 por ciento de los abusos ocurre puertas adentro de la casa y el 29 por ciento en la casa de los abuelos. “Si se suma la propia casa y la casa de los abuelos, que son los dos lugares de cuidado para un chico, estamos hablando de 55 por ciento de situaciones que ocurren donde uno supone que no debería ocurrir. En la calle, donde aparece el abuso sorpresivo, el 25 por ciento. En los lugares de tránsito habituales del niño/a –ir y venir de la escuela, el club, comprar algo...– son el 20 por ciento y, dentro de este porcentaje, el 75 por ciento de ellos ocurren en lugares habituales con conocidos o familiares y sólo el 25 por ciento en la calle con extraños”, develan Bringiotti, Del Duca y Guillem, en el capítulo “Prevalencia del abuso sexual infantil”, del libro Abuso y maltrato en la infancia y adolescencia, Investigaciones y debates interdisciplinarios, publicado por Lugar Editorial, en el 2015.