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Vamos por orden alfabético. Abbondancieri...
–Abbondanzieri, con zeta.
–Ah, de veras. Bueno: muestre.
(Mostró seguridad, le sacó un tiro de gol a Fernández en el primer tiempo y otro a Torres en el segundo.)
–Siéntese, muy bien. A ver, Battaglia... ¿Hizo los deberes?
–Hice.
(Y mostró buena marca sobre la derecha, dividiendo la cancha con Cascini, y vocación ofensiva en el segundo tiempo.)
–Bracamonte...
–Yo entré tarde, pero hice lo mío. En la primera que toqué, cabeceé al gol y después me hicieron un foul en la medialuna. Creo que cumplí, Maestro.
–Claro que cumplió. Y usted, Burdisso, también. Ya vi que puedo confiar en usted y también en Crosa. Mientras ataquen con la debilidad de Unión no hay problemas. Que pase el nuevo, Cascini: muestre.
(Mostró unas ganas enormes, serenidad para tocar, voz de mando para ordenar y, aunque se pasó un poco de revoluciones saliendo a cortar lejos en más de una ocasión, redondeó un buen trabajo.)
–A ver, Delgado: ¿trajo todos los dedos?
–Tres nomás.
–¿Perdió muchas pelotas tontamente? ¿Terminó mal muchas?
–Sí, terminé mal varias, pero considere, Maestro, que participé en los tres goles... En el primero, Ezequiel González agarró un rebote de un tiro mío, en el segundo le di el pase a Tévez y en el tercero tiré el centro. No es poco, ¿verdad?
–Muy bien, Delgado, muy bien. Puede ser que se hayan lucido más otros, pero lo suyo fue bueno, hay que reconocerlo. Que pase González.
–Acá estoy.
–¿Se la dio a sus compañeros? ¿Buscó siempre al mejor ubicado? ¿Encontró espacios? ¿Se asoció con Tévez? ¿Se fue aplaudido por la gente?
–Sí, sí, sí, sí.
–¿Se cansó después?
–Un poco.
–Siga así, González... A ver, Ibarra, ¿usted es el mismo marcador de punta sólido y con proyección que conocían los hinchas de Boca?
–Lo soy. Como si el tiempo no hubiera pasado.
–Muy bien. Y usted, Rodríguez, ¿de qué puede dar lección?
–De velocidad, de inteligencia para subir en los momentos precisos, como en esa pelota que le puse a Sosa en la cabeza en el segundo tiempo.
–Bien, bien. Que pase ahora el grandote. ¿Qué le pasa? ¿No se preparó bien?
–Me falta un poco de tiempo para encontrar la mejor forma física. Pero estuve cerca de hacer un gol. Cuando salí, la gente me aplaudió.
–Bueno, vamos a ver en la próxima. Prepárese un poco mejor. ¿Queda alguien?
–Sí; yo, Maestro.
–Ah, Tévez. ¿Se siente mejor donde lo puse ahora, más atrás con otro enganche?
–Vea, Maestro, yo con tal de estar, me da lo mismo.
–Hizo un gol..
–Me salió lindo, pero creo que pude hacer alguno más. Me falta tranquilidad para definir...
Entonces, el Maestro Tabárez habló a todo el grupo, elogió las producciones individuales y dijo que había encontrado un equipo bien parado, firme, ambicioso, generoso en el esfuerzo y creativo en la búsqueda de caminos hacia el gol.
Y puso un muy bien diez felicitado colectivo.