A Carlos Reutemann le podrían devolver el golpe de la catástrofe del río Salado en el lugar que más le duele: el bolsillo. El matrimonio Jorge Castro﷓Milagros Demiryi, que actúa como actor civil en la causa inundaciones, anunció ayer que atacará el patrimonio de Lole para resarcirse de las daños sufridos aquel fatídico martes 29 de abril de 2003, cuando su casa fue tapada por el agua y ellos y sus hijos lo perdieron todo, apenas pudieron escapar con lo puesto. "Podemos demostrar que Reutemann es culpable civilmente de la catástrofe", dijo el abogado Jorge Elizondo, que patrocina a los esposos Castro en el juicio penal que tramita el juez Jorge Patrizi (Instrucción 8º).

La semana pasada, Patrizi procesó por "estrago culposo agravado por la muerte de 18 personas" a tres ex funcionarios de Reutemann: el ex ministro de Obras Públicas, Edgardo Berli; el ex director de Hidráulica, Ricardo Fratti y el ex intendente de Santa Fe, Marcelo Alvarez, pero eximió de responsabilidad a Reutemann al considerar que en tres años de investigación ni siquiera hay "elementos suficientes" para llamarlo a indagatoria y pedir su desafuero al Senado.

El fiscal Ricardo Favaretto y dos de los imputados ﷓Berli y Alvarez﷓ ya apelaron el fallo ante la Sala II de la Cámara Penal de Santa Fe.

Uno de los argumentos del juez para declarar la inocencia de Reutemann es que sus dependientes: Berli y Fratti no le habrían advertido sobre el peligro que amenazaba a la ciudad de Santa Fe. "A mi nadie me avisó", fue el latiguillo que se cansó de usar el ex gobernador.

Elizondo expresó su rechazo al fallo de Patrizi,. "Reutemann debió haber estado informado o informarse de la tragedia". Y más allá de que ni siquiera fue molestado por el juez, "se puede demostrar que el ex gobernador es culpable civilmente" de la catástrofe. "La omisión de deber de cuidado, de las medidas necesarias para evitar la catástrofe o conjurar esos resultados constituyen responsabilidad civil, independientemente de la cuestión penal", explicó.

El abogado de los esposos Castro se mostró también en desacuerdo con el supuesto "estrago culposo agravado por la muerte de 18 personas" que se le imputa a los tres procesados: Berli, Fratti y Alvarez y a su criterio "la figura no es culposa, sino dolosa".

El estrago culposo tiene una pena de cinco años y es excarcelable. El estrago doloso no lo es. "En virtud de las limitaciones que tiene el actor civil, que no es querellante, no podemos pedir una pena ni una figura determinada pero consideramos que la figura no es culposa, sino dolosa", insistió el doctor Elizondo.

En la misma línea, criticó la resolución del juez Patrizi de no llamar a declaración indagatoria a Reutemann, "Entendemos que eso no se conjuga con los hechos que quedaron demostrados, que por omisión, él tiene responsabilidades penales", dijo el abogado.