El Frente Progresista Cívico y Social arrancó ayer su campaña electoral en la provincia en un clima de euforia y diversidad. Una policromía que el propio Hermes Binner reconoció de entrada. "Amigos, correligionarios, compañeros", dijo el candidato a gobernador al llamar a quienes lo rodeaban en el lanzamiento de la coalición ﷓socialistas, radicales, demoprogresista, aristas, peronistas y referentes sociales﷓ "a dejar atrás el pasado de postraciones santafesinas y comenzar a construir una provincia digna". Binner apeló a una metáfora para sintetizar el afán de cambio en Santa Fe después de medio siglo de hegemonía del PJ. "Los que quieren el cambio, que se suban al barco", dijo. Y ayer, en el barco estaban casi todos. Sólo faltaba la fiscal federal Griselda Tessio, propuesta por un sector de la UCR como compañera de fórmula de Binner, pero se sumó la mayoría de los dirigentes de su partido. Una de las sorpresas fue el debut de la diputada nacional María del Carme Alarcón, quizás en nombre de los sectores del campo enfrentados con la Casa Rosada. El encuentro se realizó en el salón de un hotel del microcentro santafesino. El socialismo presentó a su primera plana: el senador Rubén Giustiniani, el intendente de Rosario, Miguel Lifchitz y a todos sus legisladores nacionales y provinciales. Lo mismo hicieron el ARI y del PDP, encabezados por sus presidentes: Alberto Muñoz y Carlos Favario. La UCR sumó a una corriente cada vez más nutrida: Carlos Fascendini, Hugo Storero, Adolfo y Lilia Stubrin, Carlos Iparraguirre, Hugo Marcucci y Jorge Placenzotti, entre otros. Y hasta se asociaron Luis "Changui" Cáceres y el intendente de Vera, Raúl Seco Encina, que hasta ayer eran aliados del grupo Mimí, como se conoce a la dupla Felipe Michlig﷓Juan Carlos Millet.

"No nos asusta esta diversidad ﷓reflexionó Binner﷓, nos parece apasionante este diálogo por venir. Estamos convencidos que vamos a construir este proceso electoral para conducir los destinos de Santa Fe y así vamos a gobernar". "No hay un discurso para ganar las elecciones y otro para gobernar. A eso ya lo vivimos. Y la gente no quiere que se la estafe más. Nosotros le vamos a decir lo que pesamos y lo que vamos a hacer. Por eso es tan importante la reunión de los equipos técnicos que se van a conformar el 10 de febrero de 2007. Allí estará la gente que va a trabajar en el futuro, no paracaidistas, sino gente va a trabajar en los proyectos, y de allí saldrá la gente para gobernar la provincia", señaló.

Binner dijo que se viene "un tiempo de cambio. Un tiempo para construir esta fuerza política en forma diferente a la que lo hicimos hasta ahora. Ya no hay dos o tres que se ponían de acuerdo y bajan línea y en cada pueblito de la provincia había que hacer lo que ellos decían. Ahora, la gente debe ser protagonista del diagnóstico y la propuesta. El Frente tiene que construirse de abajo hacia arriba. Será complejo, pero es necesario porque la realidad es compleja. Y vamos a convocar a todos".

Un rato antes, uno de los aliados apeló a la metáfora del cambio. "Ya hay una enorme corriente de simpatía en la provincia hacia este Frente Progresista que encabeza el doctor Binner y que orgullasamente decimos va a ser el próximo gobernador de la provincia. El capitán de este barco que queremos llevar a buen puerto", dijo el senador Carlos Fascendini. Binner ponderó a Fascendini, después de las turbulencias en la UCR y su fallida candidatura a vice. "Quiero rescatar la actitud moral y ética que enaltece al senador Fascendini", le dijo. Lo interrumpió un aplauso sostenido que brotó en el salón del lanzamiento.

Y después recordó la primera coalición radical socialista que nació hace ya once años, en la casa del propio Fascendini, en Esperanza, cuando éste era presidente de la UCR y el líder más importante de su partido, Horacio Usandizaga, se oponía al acuerdo. "Pasaron once años, indudablemente hemos aprendido muchísimo sobre lo que hay que hacer y lo que no hay que hacer. Pero esta actitud generosa del senador Fascendini no hace más que darle fundamento al Frente Progresista", afirmó Binner.

"Escuchamos que este es un barco que tiene mascaron de proa, pero lo importante es que entre todos podemos hacerlo llegar a puerto. Esta es la gran convocatoria", expresó Binner. "El gobierno no se ejerce con cuatro o cinco avispados, se ejerce con muchísima gente, hay que convocar a todos, a las universidades, a los sindicatos, a las entidades empresarias, a las instituciones de nuestros barrios, a los clubes, a las cooperadoras para decirles: se pone en marcha una transformación positiva de Santa Fe. Esta será nuestra consigna. Los que quieren construir, los que creen en el Frente Progresista, los que tienen ideas para aportar, los que creen que se puede cambiar la realidad con diálogo, que suban al barco. No todo se compra ni todo se vende. Hay valores que defender. Y vale la pena".

Binner cerró su discurso con una ironía. Una respuesta a los "pícaros" que asociaron el lanzamiento del Frente justo un 28 de diciembre, el día de los inocentes. "Los únicos inocentes son los niños que no eligieron que nacer en un lugar indigno, en un lugar pobre. Y nuestra sociedad tiene que pensar en los niños si queremos futuro. Esos niños de hoy irán a la escuela mañana y serán dirigentes algún día o estarán integrados a la sociedad en total desventaja. Nosotros tenemos que darle a todos los niños la posibilidad de la educación, de la alimentación, de las vacunas, que pueda haber una democracia biológica para que en el futuro funcione la democracia social. Por eso vamos a seguir trabajando. A no bajar, los brazos, a seguir subiendo gente al barco, que este barco va a muy buen puerto", concluyó.