5 Estudiantes: Andújar; Alayes, Angeleri, Desábato; Moreno y Fabianesi, Braña, Verón, Benítez; Salgueiro, Maggiolo, Piatti. DT: Roberto Sensini.

2 Ñuls: Villar; Aguilar, Spolli, Schiavi, Ré; Cabrera, Scotti, Donnet, Quiroga; Salcedo, Vázquez. DT: Ricardo Caruso Lombardi.

Goles: PT: 2m Moreno y Fabianesi (E), 20m Salcedo (Ñ) y 37m Maggiolo (E). ST: Salgueiro (E), 29m Piatti (E), 31m Donnet (Ñ), 36m Piatti (E).

Cambios: ST: 12m Da Silva por Vázquez (Ñ), 25m Llama por Aguilar (Ñ), 28m Enzo Pérez por Moreno y Fabianesi y Juan Díaz por Salgueiro (E), 36m Steinert por Cabrera (Ñ) y 38m Lugüercio por Piatti (E).

Arbitro: Gustavo Bassi

Cancha: Ciudad de La Plata

Con sus jugadores de mayor talento en alto nivel, Estudiantes ofreció ayer su mejor actuación en mucho tiempo, marcando cinco goles, la mayoría de los cuales tuvieron una destacada gestación. Ante eso Ñuls sólo pudo ilusionarse con un empate transitorio, que duró algo más de un cuarto de hora, y marchitó a los pies de Piatti y una defensa desbordada por los aciertos del rival. Justo Villar, de errática reacción en dos tantos, dejó un invicto de cinco partidos, deteniendo así la racha ascendente que ostentaba el equipo.

Las presunciones de que se estaba frente a uno de los mejores partidos de la fecha se vieron reflejadas con sólo 45 minutos de fútbol, donde Estudiantes y Ñuls animaron un juego de dominio alternado, goles en ambos arcos, yerros compartidos y lúcidos aciertos en el equipo local.

Si bien Ñuls se vio sacudido en sus aspiraciones por un prematuro gol, el traspié en la red no confundió a los dirigidos por Ricardo Caruso Lombardi. Es que el rojinegro se sostuvo en su propuesta deportiva, jugando extensos períodos del primer tiempo en campo rival.

Pero quien mostraba facilidades para desequilibrar era Estudiantes. Prueba de ello fue la acción hilvanada a 120 segundos de comenzado el juego, y nacida en la pegada de Benítez, quien metió un pase en profundidad a espaldas de Aguilar que dejó a Piatti desbordando por derecha y sacando un centro atrás que encontró a Moreno y Fabianesi frente al arco para batir a Villar tras cinco partidos de invicto.

A esto la lepra respondió con fluidos ataques, acciones que involucraba a todos los volantes y que se inclinaban preferentemente por el costado derecho del campo, zona que cubría Benítez y Desábato. Pero así como Estudiantes lastimaba por el talento de sus jugadores en el trato de pelota, los esfuerzos de los rojinegros se volcaba a un coordinado despliegue físico que permitía poner a seis o siete jugadores en funciones ofensivas. Aunque Andújar tenía poco trabajo y cuando lo probaron no tuvo chances. Fue en una pelota que Vázquez le ganó en el área a Desábato y cayó en los pies de Donnet, quien tocó rápido para Salcedo, el cual doblegó al uno platense con toque de derecha al primer palo.

La respuesta del local se tradujo en mayor agresividad ofensiva, y en una gran maniobra de Piatti (desparramó a Schiavi en un mano a mano con un caño y probó al arco de zurda) a Maggiolo se le abrió el arco al capturar una pelota que no pudo dominar Villar.

Esta vez Ñuls acusó el golpe anímico y recién en el segundo tiempo el equipo reordenó sus pretensiones, donde en los primeros cinco minutos buscó el empate con dos disparos de Salcedo. En cuanto a Vázquez, que fue titular para ganar en presencia aérea, el nueve no cabeceó ningún centro, al igual que sus compañeros. Y de repente todo se desvaneció con una fallida salida de la defensa, que dejó a Salgueiro corriendo sólo contra Villar, a quien superó con un tiro de emboquillada que al arquero se le escurrió de las dedos.

Fue Ñuls por el descuento y volvió a encerrar al pincha en su campo. Lo tuvo Quiroga con zurdazo cruzado y Salcedo con remate alto. Pero con una extraordinaria mediavuelta Piatti clavó la pelota en el ángulo derecho para estirar la diferencia, la cual la lepra redujo con un excelso tiro libre el palo de la barrera de Donnet. Aunque el cierre estuvo en los pies de Piatti, la figura de la cancha, marcando el quinto al tocar cruzado un centro de Enzo Pérez.