Con solo un jugador lesionado, Newell's volvió a las prácticas ayer por la tarde tras la histórica derrota por 5 a 0 ante Nueva Chicago. La caída en Mataderos precipitará decisiones del cuerpo técnico, con jugadores que ya no volverán a vestir la rojinegra. Bernardi tiene dos semanas de entrenamientos, previo al partido con Lanús, donde definirá gran parte del futuro del equipo.

En el retorno a Bella Vista, el único con problemas físicos fue Gabriel Báez, quien pidió el cambio el sábado por un esguince de tobillo. Al juvenil le realizarán estudios para descartar lesión. Víctor Figueroa y Víctor López, en cambio, se integraron con normalidad y podrán jugar la semana que viene ante el granate, en el último partido en el Coloso del torneo.

Pero Bernardi no aceptó lo hecho por los jugadores el pasado fin de semana y su disgusto lo llevará a adelantar el fin de ciclo de algunos jugadores en el club. El entrenador todavía no dio señales de los futbolistas que excluirá, pero meterá mano en la próxima formación y aquellos que pierdan la titularidad difícilmente vuelven a tener una oportunidad con la camiseta rojinegra. Nehuén Paz, Marcos Cáceres y Hernán Bernardello fueron de lo más flojo en cancha de Nueva Chicago, por lo cual son los mayores candidatos a quedar al margen del encuentro con Lanús, que Newell's necesita ganar para mejorar su puesto en la clasificación a la Liguilla Pre-Sudamericana.