En la búsqueda por recuperar la autonomía financiera, la dirigencia de Central acordó la venta de Hernán Encina a un grupo empresario y programa una política de ajuste económico que perjudicará, entre otros, a Angel Tulio Zof. Al respecto, un directivo de la entidad fue claro: "Hay muchos gastos que no podemos seguir afrontando. Va a ver un recorte importante del presupuesto, por más que se perjudique a gente amiga. Pablo (Scarabino) tomó la decisión de decir no a muchas cosas". Con el medio millón de dólares que ingresarán a la institución por la transferencia del Sapito, la dirigencia se pondrá al día con los empleados, incluido los futbolistas. Pero es necesario concretar otra negociación. "Todos están en venta menos (Cristian) Villagra", confiaron. Y quien tiene mejor vidriera es el arquero Juan Ojeda.

A la desvinculación del club con el grupo inversor sólo le falta la formalidad de los papeles. Por eso la dirigencia está a la búsqueda de nuevos recursos económicos que traigan previsibilidad a la tesorería. Para estos casos la salida más ágil es la transferencia de jugadores. Y ayer la directiva llegó a un acuerdo con los representantes de Hernán Encina para ceder el pase del Sapito por una cifra que ronda los 500 mil dólares. "Se venía hablando desde hace un tiempo. Todavía no se firmó, pero es muy probable que se haga", admitió un directivo de Arroyito.

Ante la probabilidad de negociar al volante de barrio Las Flores, Néstor Gorosito rescató hace una semanas a Andrés Díaz, quien en los últimos encuentros fue el encargado de reemplazar a Eduardo Coudet, desplazando así al Sapito. Con ese dinero la dirigencia saldará haberes atrasados con los empleados de la entidad y enfrentará un fin de año sin mayores trastornos.

Pero la tesorería necesitará más billetes para el año que viene. Quien podría traer serenidad económica es Juan Ojeda, por quien hay un interés cierto para llevarlo al fútbol mexicano. Aunque a diferencia de Encina, será difícil convencer al arquero para que firme la venta dado que en julio próximo el uno se quedará con el pase en su poder.

"El único jugador que no queremos vender es (Cristian) Villagra. El resto, incluso (Marco) Ruben, es negociable", apuntó un directivo. Aunque la decisión más importante que tomó la dirigencia no refiere precisamente a la venta de Encina. "Vamos a ser muy austeros el año que viene. No van a ver grandes incorporaciones. Se ha decidido hacer un recorte importante en el presupuesto, por más que se afecte a intereses de algunos amigos. Pablo (Scarabino) ya no tendrá el sí fácil", anunció un miembro de la Comisión Directiva.

El recorte afectará, entre otros, a Angel Zof. El Viejo tiene un contrato muy similar al de Néstor Gorosito. Desde que asumió en el gobierno auriazul Scarabino ha sido fiel al entrenador más ganador de Central. Pero Zof, por dificultades físicas, ya no puede dedicarse en plenitud al club y la entidad ya no puede sostener su sueldo.

En sintonía a la conyuntura financiera de la institución, en los últimos días hubo un acercamiento de los dirigentes con las autoridades de la General Motors. La firma automotriz tiene interés de poner su nombre comercial en el estadio y sponsorizar la camiseta del primer equipo. Pero para la tesorería estas gestiones no ofrecerían soluciones de fondo: "Se habla de hacer remodelaciones en el estadio a cambio de publicidad. La reunión fue de carácter protocolar. Esa es la verdad", reconoció un directivo canalla.

Ajeno a las últimas decisiones políticas, Néstor Gorosito dirigió ayer por la mañana en Palos Verdes la primera práctica de fútbol de la semana. El entrenador canalla podrá disponer el regreso de Juan Azconzábal, quien ante Argentinos Juniors cumplió con una suspensión y fue reemplazado por Damián Ledesma. Pero como el Negro fue la figura del partido ante el bichito, Pipo aún tiene dudas. "Los vamos a evaluar en la semana. Todavía no sé", fue la escueta respuesta del entrenador al posible ingreso de Azconzábal por Ledesma. La práctica de fútbol tendrá lugar mañana por la tarde, probablemente en el estadio. Allí se podrán conocer las ideas que tiene el técnico canalla para visitar el sábado a las 16.30 a Arsenal. Pero más allá de la incertidumbre generada por la habilitación del ex jugador de Estudiantes, el resto del equipo no tendría variantes.

Tras el compromiso en Sarandí el plantel de Arroyito tendrá sólo cuatro días de entrenamientos para preparar el compromiso de la 17º fecha. Porque ayer en la reunión de Comité Ejecutivo se dispuso que el partido entre Central y Quilmes se lleve a cabo el viernes 24 a la 19, en el Gigante de Arroyito, y con televisación en directo para todo el país.