En los últimas semanas, en Rosario, cayó la imagen positiva del gobierno nacional y provincial. Entre agosto y fines de septiembre del año en curso, la gestión del presidente Néstor Kirchner se recortó en casi doce puntos porcentuales, mientras que la del gobernador Jorge Obeid retrocedió ocho puntos. En cambio, la valoración de los rosarinos hacia la intendencia de Miguel Lifschitz mejoró: subió un siete por ciento. Los datos surgen de un relevamiento hecho por la consultora que dirige Andrés Mautone, realizado durante los últimos días del mes pasado.

En parte, los datos no sorprenden ya que el intendente Lifschitz fue el único de los tres dirigentes que plebiscitó su gestión de gobierno y fue reelecto por amplio margen: obtuvo casi el 60 por ciento de los votos en las elecciones del 2 de septiembre pasado.

El gobernador Obeid, que será el primer candidato a diputado nacional el 28 de octubre del Frente para la Victoria, perdió en los comicios provinciales a través de su candidato, Rafael Bielsa. El Presidente, que apuesta a su mujer para que lo suceda al frente de la Casa Rosada, desde el 10 de diciembre, también apostó fuerte en Santa Fe a favor de su ex canciller. Sin embargo, la candidata del oficialismo conserva, según otras mediciones, alta intención de voto en la provincia, recibiendo cerca de un 40 por ciento de los sufragios de quienes votaron por el electo gobernador socialista Hermes Binner en septiembre último.

El trabajo de Mautone se hizo a través de una encuesta por muestreo, a 400 rosarinos en condiciones de votar mediante un diseño muestral probabilístico estratificado con adjudicación proporcional.

Comparando los valores actuales con los registrados en la medición de agosto pasado, el nivel de aprobación de la gestión del presidente Néstor Kirchner se ha recortado en 11,8 por ciento. Por el contrario, la imagen regular de la misma se ha incrementado en 5,4 por ciento; mientras que el nivel de desaprobación también lo ha hecho, pero en 6,7 por ciento.

La aprobación de la gestión de Obeid se ha recortado en 8,1 por ciento; mientras que, por el contrario, tanto el nivel de desaprobación como su imagen regular se han incrementado en 6,3 y 2,1 por ciento.

El nivel de aprobación de la gestión de Lifschitz se ha incrementado en 7,3 por ciento; mientras que, tanto la imagen regular como el nivel de desaprobación se han recortado en 2,4 y 4,6 por ciento respectivamente.