Durante el 2005 la municipalidad de Rosario emitió 30 mil actas de infracción de tránsito mensuales, un 20 por ciento más que en 2004. En el municipio atribuyen esta cifra, en parte al notable incremento del parque automotor y a la cantidad de automovilistas que obtuvieron su licencia de conducir: un 150 por ciento más comparando ambos años. Las faltas más registradas fueron mal estacionamiento (50 por ciento), exceso de velocidad (40 por ciento) y cruzar el semáforo en rojo (8 por ciento), además de los test positivos de alcoholemia que se contabilizan en una estadística complementaria. Para reducir estos índices, el municipio ya está trabajando junto a la Subsecretaría de Transporte provincial para implementar cuanto antes en la ciudad el sistema español "carné de conducir por puntos", según confirmó a Rosario/12 el titular del Tribunal de Faltas, Gustavo Lucini.

En España esta modalidad comenzará a implementarse desde julio y otorga 12 créditos a todos los conductores -8 para los novatos-, que se irán perdiendo cuando el conductor cometa alguna de las 27 infracciones contempladas en la ley. Cuando el conductor pierde los 12 puntos se le retira la licencia y recién seis meses después puede obtener una nueva superando un curso de reeducación y sensibilización. Lucini aclaró que la aplicación en Rosario del modelo español no "tendrá sentido si no hay coordinación con la provincia para que el infractor rosarino no pueda sacar su carne en otra localidad. Para ello es fundamental que se aplique el registro de antecedentes provincial".

Las autoridades de la Dirección de Tránsito han destacado en más de una oportunidad los positivos resultados obtenidos a partir del control de velocidad y los test de alcoholemia, medidas que, aseguran, implicaron una importante disminución de los accidentes, en particular los fatales. Pese a ello, en la ciudad se cometen a diario decenas de infracciones de tránsito que no son severamente sancionadas más allá de la multa económica.

Hace dos años la municipalidad había apostado a la "probation" como alternativa para generar conciencia entre los infractores. Esta modalidad, reglamentada en el 2004 por el intendente Miguel Lifschitz, contempla "realizar trabajos no remunerados en favor del Estado o de instituciones de bien público, fuera de sus horarios de trabajo" para saldar una condena. Desde el Tribunal de Faltas, órgano encargado de conceder la probation, Lucini reconoció que la experiencia no ha sido positiva.

"En estos años no se aplicado en más de 30 casos. Mucha gente desconoce esta herramienta y los jueces de faltas no la pueden aplicar de oficio, sólo pueden sugerirla. Además no se la puede utilizar para faltas graves y como el costo de la hora trabajada es de 10 pesos para muchos infractores es más sencillo pagar la multa que hacer un trabajo comunitario durante 40 horas", reflexionó Lucini, quien adelantó que el municipio no intentará perfeccionarla. "Más bien se está pensando en otras alternativas", puntualizó.

Según datos oficiales durante el 2004 la municipalidad labró 25 mil actas por infracciones de tránsito. El año pasado esa cifra trepó a los 30 mil. Encabezan el ranking las contravenciones por estacionar en lugares no permitidos (50 por ciento), el exceso de velocidad (40 por ciento) y pasar el semáforo en rojo (8 por ciento).

Según comentó Lucini, en el municipio trabajan para implementar cuanto antes el sistema español de "carne de conducir por puntos", herramienta que consideran efectiva. "Estamos trabajando con la provincia, porque no es fácil si no hay coordinación con el resto de las localidades. De nada serviría que en Rosario se aplique este sistema, se le retire la licencia a un conductor y esta persona la pueda sacar en Funes. Es imprescindible que este vigente el registro de antecedentes provincial", finalizó Lucini.