La intendenta Mónica Fein fue ayer en busca de nuevos interlocutores en Casa Rosada y en procura de establecer con el gobierno central una agenda de temas concernientes a Rosario. La recibieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, a quienes le enumeró obras de interés para la ciudad y de la que espera aporte federal. El más urgente, la finalización del barrio para la comunidad Qom sobre avenida de la Travesía, para lo cual Fein les dijo a los funcionarios que necesita unos 100 millones de pesos.

Fein viajó con una lista de temas que ya ventilaba en visitas anteriores a Buenos Aires, cuando quienes la esperaban eran Florencio Randazzo, como ministro del Interior, Cecilia González, en el Ministerio de Seguridad, o Aníbal Fernández cuando ocupaba el sillón en el que hoy se sienta Peña.

"Queremos avanzar en proyectos estratégicos para Rosario", declaró Fein ayer por la tarde, luego del encuentro con los hombres del presidente Mauricio Macri. "Fue una reunión excelente. Vinimos a plantear que queremos tener una agenda propia, que nos permita avanzar en los temas de la ciudad", definió a este primer contacto de reconocimiento. Y ya fijaron una segunda reunión para avanzar en enero, ya con funcionarios técnicos tanto de la administración nacional como municipal, para trabajar sobre los proyectos en ciernes, y la gestión de créditos internacionales para su financiamiento.

En el nuevo barrio Travesía hay en construcción un plan de 500 viviendas, de las cuales el 60 por ciento ha sido entregado a sus beneficiarios, en su mayoría miembros de la comunidad Qom. Es la continuación de aquel fallido emprendimiento de la Secretaría de Vivienda nacional confiado a la Fundación Sueños Compartidos, y que terminó con un desfalco que involucró entonces a Sergio Shoklender. El barrio continuó con fondos nacionales, pero con la ejecución a cargo del municipio. En la actualidad, la intendencia reclama a la Nación un aporte final de 100 millones de pesos para concluir esa urbanización y terminar de transformar ese asentamiento precario de Travesía, entre JJ Paso y Génova.

"Las ciudades deben ser motor de los cambios y para ello debemos y queremos tener una agenda propia, una agenda urbana que nos permita avanzar en los temas más urgentes para la ciudad, como lo son infraestructura, vivienda, seguridad y movilidad, y éso es lo que vinimos a plantear", dijo Fein.

La agenda que acercó la intendenta también contempló la necesidad de acceder a créditos internacionales que permitan llevar adelante distintos proyectos elaborados por la ciudad, para los cuales Rosario se encuentra muy bien calificada por el grado de credibilidad y confianza que genera a los organismos mundiales que podrían financiarlos.

Otros temas abordados fueron las obras de Movibus Norte, la continuidad del Programa de Mejoramiento de Barrios (Promeba), que se desarrolla en tres sectores de la ciudad y la importancia de potenciar las posibilidades que tiene el sistema de hidrovía en la región.