Algunos se fueron más conformes que otros del municipio. Los referentes del PJ se retiraron "satisfechos porque tuvimos una reunión cara con el intendente y sus secretarios para hablar de los temas que le interesan a los rosarinos. Limamos algunas asperezas que teníamos y acordamos trabajar en conjunto en una serie de puntos para solucionar los problemas estructurales de la ciudad", según indicó Arturo Gandolla. "Lo importante es que lo conversado no quede sólo en palabras y que se cumpla", acotó el también justicialista Osvaldo Miatello.

Desde Encuentro por Rosario la edila María Eugenia Bielsa remarcó la importancia de avanzar en la implementación del sistema de alerta temprana "que una ciudad como Rosario tanto necesita".

El radical Jorge Boasso fue el más crítico. Rescató el diálogo aunque lamentó que sea esporádico. El concejal del radicalismo le entregó a Lifschitz un paper con 10 propuestas para salir de la crisis ante el "agotamiento del modelo socialista de ciudad" que incluyó: dejar sin efecto los aumentos de la TGI, reclamar a la provincia la coparticipación mal liquidada y relocalizar las villas de emergencia.