La viceministra de Trabajo, Noemí Rial, explicó que "se hizo todo lo posible; se negoció durante extenuantes horas y se trató de una muy buena propuesta, aunque fue rechazada". Adelantó, además, que a partir de ahora "se cayó el acuerdo, lo que implica -entre otras cosas- que los trabajadores no percibirán los 600 pesos a cuenta que fueron ofrecidos inicialmente".

En el mismo sentido, Rial indicó que desde Trabajo y la Secretaría de Transporte analizarán "los pasos a seguir" a partir de la decisión negativa de delegados y trabajadores. A la vez, intentó tranquilizar a los casi 300 mil usuarios al asegurar que "ya han adoptado los recaudos necesarios para suplantar el recorrido de la línea, reforzando las unidades de otras empresas que realizan el mismo recorrido".

La cartera de Trabajo junto a Transporte habían ofrecido a los delegados sindicales "un acuerdo integral de resolución", que los gremialistas no firmaron en principio argumentando "la necesidad de consultar a la asamblea". La propuesta oficial, contemplaba el pago de dos cuotas de 300 pesos a cuenta los días 24 y 28, además del reconocimiento de los haberes caídos, el pago de las diferencias salariales y una auditoría conjunta de Trabajo y Transporte para detectar esas posibles erróneas liquidaciones. Así como también ofrecía el reconocimiento patronal de la UTA y de los delegados, reuniones periódicas para resolver temas pendientes y el compromiso de paz social.