"Me siento contento, porque han sido muchos años de trabajo", expresó el flamante jefe de Estado. "Tengo ganas, ilusión y determinación para llevar a España adelante", manifestó un día después de anunciar las medidas de ajuste, que contemplan un recorte de gastos de 16.500 millones de euros, el congelamiento de las vacantes en la administración pública, la eliminación de los feriados puente y la suspensión de los programas de prejubilación.

El "único y exclusivo" incremento del gasto para el año próximo prevé el aumento de las pensiones de acuerdo con el índice de precios al consumidor a partir del 1 de enero. El líder del Partido Popular impulsará además 12 reformas legales en los primeros tres meses de 2012: "En política no existe la herencia a beneficio de inventario", consideró ayer.

Los diputados de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Carlos Salvador, y del Foro Ciudadano, Enrique Alvarez Sostres, prestaron su apoyo a la candidatura de Rajoy, mientras que 14 se abstuvieron: los siete diputados del partido vasco de izquierda Amaiur, los cinco del Partido Nacionalista Vasco (PNV) y los dos de Coalición Canaria-Nueva Canarias.

Los vascos de Amaiur justificaron su abstención con el argumento de que no participan en la elección del presidente del Gobierno de España, mientras que el PNV y los nacionalistas canarios prefirieron abstenerse hasta que se concreten los compromisos de diálogo sobre los temas de sus respectivas comunidades a los que se comprometió Rajoy durante el debate.

El resto de las formaciones políticas del arco parlamentario votaron en su contra, tal cual lo habían adelantado durante las dos jornadas que duró la sesión de investidura. Quienes votaron en contra del político de derecha fueron los 110 diputados del PSOE, 16 del catalán Convergencia i Unio (CiU), ocho de Izquierda Unida (IU), dos de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), uno de la Chunta Aragonesista (CHA), cinco de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), tres de Esquerra Republicana (ERC), dos el Bloque Nacionalista Galego (BNG), uno de Compromís-Equo y otra de Geroa Bai.

Tras la asunción, Rajoy recibió una llamada telefónica del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para felicitarlo por su reciente investidura como nuevo jefe del Ejecutivo. Según informaron fuentes del PP, Rajoy conversó durante unos 10 minutos con Obama, quien le mostró su "disposición a mantener unas relaciones excelentes" entre España y Estados Unidos.