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Por otra parte, el ministro anticipó que esta tarde se esperan nuevos récords de consumo de suministro, pero subrayó que "el sistema va a responder muy bien porque no hay ningún problema de oferta de energía". De Vido especificó que el pico de demanda de ayer llegó a un pico de 21.500 megavatios y la reserva es de 1.500 megavatios más.

De Vido informó que desde la hora del apagón los equipos técnicos del Ministerio de Planificación y las empresas recorrieron los 23 kilómetros de línea que comunican las dos subestaciones, señaladas por las empresas de distribución como la fuente del problema, y "no se detectó ninguna falla física".

El funcionario agregó que sobre una de las líneas se realizó "durante esta gestión" una renovación total entre Hudson y Quilmes, mientras los aisladores de ambas líneas fueron renovados y las tareas de mantenimiento realizadas.

"El Estado realizará una denuncia penal para esclarecer la situación. Nos llama la atención donde se produjo el corte, a la hora que se produjo y sobre una línea que estaba a la mitad de su capacidad", insistió De Vido.

"En nueve años no tuvimos un blackout, sí ha habido otras caídas de líneas y subestaciones, pero no tuvo repercusión como el corte de ayer que ocurrió en la Ciudad de Buenos Aires", criticó el ministro, y explicó que aún el 10 por ciento de los usuarios afectados continúa sin servicio.