La sesión especial se inició este mediodía cuando el kirchnerismo junto 134 diputados -5 más que los necesarios para cumplir con el quórum reglamentario- y allí la sorpresa fue la presencia del radical correntino Rodofo Fernández, quien estuvo desde temprano sentado en su banca y ayudo a superar el piso de 129 diputados para comenzar la deliberación. El oficialismo aportó 109 diputados; 7 el Frente Cívico de Santiago del Estero; 5 Nuevo Encuentro; 2 pampeanos, 3 salteños, 3 de Movimiento Popular Neuquino, a los que sumó el sanjuanino Eduardo Ibarra y el puntano Sergio Panza.

"Todas las críticas huelen a política de ajuste, al no ser precisas esto huele a que el rechazo no es por sus fallas sino por sus virtudes", aseveró Feletti en el inicio de la sesión especial, en la que se buscará aprobar el paquete de leyes económicas enviado por el gobierno. Criticó a quienes acusan al oficialismo de "dibujar y de falta de seriedad" en las previsiones económicas para 2014 de un aumento del 6,2 por ciento del PBI, gastos por 927 mil millones de pesos y recursos por un billón.

"El Presupuesto no es un dibujo", aseguró el diputado, y añadió que "las previsiones explican una política fiscal consistente en mantener la actividad del Estado, superar los vaivenes que provoca el nivel de actividad y evitar el sobreendeudamiento".

Por su parte, Alfonso Prat Gay (Coalición Cívica) propuso un dictamen para devolver al Poder Ejecutivo el proyecto de Presupuesto a fin de que se presente otro "bien confeccionado" para ser tratado el próximo 1 de noviembre. "En otras palabras, le decimos al Poder Ejecutivo vaya y haga bien los deberes, utilizando incluso estadísticas privadas", explicó.

A su turno, la diputada por el Frente Renovador Graciela Camaño acusó al Gobierno de "ocultista" y dijo que el Presupuesto 2014 "apenas si alcanza el rango de libreta de almacenero". Eduardo Amadeo, también miembro del Frente Renovador, manifestó que se trata de "un presupuesto oscuro, basado en supuestos falsos que se podrán modificar con los superpoderes".

Por el PRO, Federico Pinedo adelantó que su bloque votará en contra del Presupuesto "porque ni siquiera hubo tiempo a leerlo". Expresó que "el Gobierno se ha encargado de que este proyecto tenga uno de los análisis más cortos de la historia de la democracia, ni siquiera hubo tiempo de leerlo completo, los ciudadanos no se pudieron informar ni participar del mismo".

El proyecto de Presupuesto para el año próximo diseñado por el Gobierno nacional estima una pauta de crecimiento del 6,2 por ciento, un aumento del consumo del 5,7 por ciento, un valor promedio del dólar de 6,33 pesos y un incremento del 27,7 por ciento en el monto de los recursos, que tienen como prioridad el denominado gasto social, que abarca un 61,4 por ciento de lo pautado.

En tanto, las prórrogas de los impuestos al cheque y del adicional de emergencia del cigarrillo están incluidas en la recaudación prevista en la ley de gastos y recursos. Los presidentes de los bloques partidarios acordaron un cronograma de debate, por el cual se realizarían los discursos sobre los tres proyectos en forma conjunta, para luego pasar a la votación de cada uno de ellos.

Entre las presentaciones de cada uno de los dictámenes, los oradores individuales y las presentaciones y cierres de cada uno de los bloques, se llegaría a las 15 horas de sesión. Luego, las votaciones y la discusión en particular de cada iniciativa demandarían otras tres horas, con lo que se llegaría a las 18 horas de sesión, es decir hasta las 5 o 6 de la madrugada de mañana.