Lunes, 20 de enero de 2014 | Hoy
16:15 › MAR DEL PLATA
El secretario general de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, se mostró molesto con la ausencia de Sergio Massa y Daniel Scioli a la "cumbre" sindical convocada por los dirigentes gremiales opositores, y les reprochó que "si no tienen huevos, que no vengan". "Los dirigentes gremiales -reconoce la Declaración de Mar del Plata- somos conscientes que la crisis de representatividad y credibilidad que afecta a muchas organizaciones tiene, entre sus causas principales, la ausencia de un verdadero compromiso con los trabajadores, de un sentimiento que inspire el comportamiento personal y colectivo".
Acompañado entre otros por el excandidato a diputado Gerónimo Venegas, y el secretario general de los camioneros, Hugo Moyano, Barrionuevo afirmó que la reunión "se hizo para buscar la unidad con todos, sin exclusiones, como lo hicimos en otras oportunidadesö y, según dijo, apunta "a la paz social". A la vez, expresó que su acercamiento a Moyano "no es una reunión corporativa o para entorpecer al Gobierno", y aclaró que "de nosotros no va a salir una desestabilización, solamente no vamos a dejar de reclamar los intereses del movimiento obrero".
Sobre la ausencia de los gobernadores de Buenos Aires y de Córdoba, Daniel Scioli y José Manuel de la Sota, y del diputado nacional Sergio Massa, invitados a la "cumbre", Barrionuevo advirtió que "queríamos saber sus propuestas, ya que quieren ser presidentes", y los desafió: "Ya van a venir cuando nos necesiten".
Moyano, por su parte, señaló que "buscamos el fortalecimiento de las organizaciones gremiales, no sólo para discutir salarios sino para aspirar a algo más", y reiteró que "el objetivo del movimiento obrero debe ser el poder, porque la historia cambiará cuando un hombre de las filas del trabajo que haya sufrido necesidades, que no haya tenido un plato de comida en su casa, tenga la conducción del país", aunque anticipó que él no piensa postularse para ese cargo. Para el líder camionero, el encuentro de Mar del Plata "es el comienzo de una nueva etapa del movimiento obrero, con la construcción de la unidad, más allá de pequeñas diferencias que tuvimos o que tengamos".
Roberto Fernández, de la Unión Travinviarios Automotor (UTA), alineado con la CGT que conduce el metalúrgico Antonio Caló, aclaró que "no vengo en representación de alguna CGT sino porque más que nunca tenemos que estar unidos y porque demandamos los mismos derechos" y justificó la ausencia de los políticos invitados recordando que "algunos dicen que somos 'piantavotos'".
El documento final aprobado por los escasos dirigentes que asistieron a la convocatoria reclama "el urgente tratamiento y solución" de "paritarias gremiales libres, sin techos y anticipadas" y la "equiparación" de los haberes jubilatorios con el Salario Mínimo Vital y Móvil. La declaración de Mar del Plata exige la "eliminación" del Impuesto a las Ganancias y la "devolución de las retenciones de los fondos en poder del Gobierno de las obras sociales sindicales". También reclama "la inmediata puesta en marcha de la erradicación del narcotráfico y la inseguridad en el país" y "la revalorización de los derechos y garantías" de la ley de Contrato de Trabajo.
"Los dirigentes gremiales -reconoce el documento- somos conscientes que la crisis de representatividad y credibilidad que afecta a muchas organizaciones tiene, entre sus causas principales, la ausencia de un verdadero compromiso con los trabajadores, de un sentimiento que inspire el comportamiento personal y colectivo". El documento advierte que "en la generalización del doble discurso y de la mentira como forma de actuar, o en la contradicción permanente entre lo que se dice y lo que se hace, se van agrandando las dudas sobre el futuro".
Minutos antes de la reunión en el hotel "Juan Domingo Perón", Barrionuevo había advertido que "a los que quieren ser presidentes y hoy no vinieron, les pedimos que nos expliquen cómo van a hacer con la inflación, con la desindustrialización, porque si no tienen huevos que no vengan", apuntó el dirigente sindical. Además, el gastronómico respondió a las críticas que realizaron desde el oficialismo: "Los trabajadores somos los responsables de que exista la democracia y fuimos los que luchamos contra la dictadura militar y sufrimos persecuciones, y estuvimos presos. Pero ellos dónde estaban, y dicen que nos reunimos para complotar como dicen estos 'cacatú' que no sé de dónde salen".
Por su parte, el diputado nacional del Frente para la Victoria, Edgardo Depetri, aseguró que los dirigentes sindicales presentes en el encuentro "no expresan lo mejor del sindicalismo que se debe democratizar" y sostuvo que las "ausencias" de Massa y del gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, "vacían la convocatoria". "Van a disfrazarlas con algún paro general o alguna iniciativa de movilizar: es más de lo mismo", advirtió.
En declaraciones a radio América, Depetri consideró que "la cumbre de Barrionuevo y Moyano no va a aportar mucho en el debate de cómo resolvemos los problemas. Desde ese lugar no hay una propuesta para mejorar la situación política y social" y agregó que la intención es ver "cómo recuperan protagonismo y decisión en el partido justicialista".
Además, Depetri aseguró que los trabajadores argentinos están "en todo el país atentos al tema principal que es la defensa de los puestos de trabajo".
Hugo Moyano, por su parte, señaló que "buscamos el fortalecimiento de las organizaciones gremiales, no sólo para discutir salarios sino para aspirar a algo más", y reiteró que "el objetivo del movimiento obrero debe ser el poder, porque la historia cambiará cuando un hombre de las filas del trabajo (...) tenga la conducción del país", aunque descartó nuevamente su postulación.
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