Godoy reaccionó así tras el nuevo allanamiento que se hizo en el módulo donde están alojados en la cárcel de Marcos Paz los detenidos por causas de derechos humanos, entre ellos Miguel Etchecolatz, el primer represor condenado en un juicio en donde actuó como querellante López, desaparecido hace nueve meses.

Existe "una necesaria complicidad del Servicio Penitenciario y como mínimo la desidia del Ministerio de Justicia de la Nación al momento de permitir y facilitar que los represores continúen teniendo dentro del penal un trato privilegiado", advirtió en declaraciones a la agencia DyN.

Fuentes judiciales indicaron que el operativo habría sido ordenado por una supuesta alteración de datos por parte del Servicio Penitenciario Federal en un allanamiento anterior y allí se habría detectado la "omisión de números de teléfonos clave para establecer los cruces de llamadas" entre los detenidos y otras personas en el exterior del penal así como supuesta "adulteración de los datos de las visitas".

Se cree que la desaparición de López, el 18 de septiembre del año pasado, a 24 horas de que se conociera la condena a reclusión perpetua de Etchecolatz, habría sido una advertencia para evitar que se sigan sustanciando los juicios contra los represores que habían sido beneficiados por las ahora derogadas leyes de nulidad.

Precisamente, Godoy sostuvo que la investigación por la desaparición de López, que sustancia el juez federal de La Plata Arnaldo Corazza, "tiene los límites que el poder político dispone".

"La llevan adelante las fuerzas de seguridad de las cuales nosotros desconfiamos en algunos casos y consideramos que necesariamente están involucrados en otros, y el Poder Judicial no va a avanzar más allá de los que las fuerzas, que son las realizan los controles que determina el juez, desean", dijo la abogada.

Según recordó, "hace ya tres meses se hizo un procedimiento similar donde no se encontró nada porque (los detenidos) habían sido informados" del operativo.

"Lo que ha demostrado este segundo procedimiento realizado sorpresivamente es confirmar lo que siempre dijimos desde los organismos de derechos humanos: los privilegios que gozan dentro de la cárcel aquellos que están acusados de delitos de lesa humanidad", añadió.

Al respecto, la abogada aludió a "los celulares, con líneas telefónicas provistas por el propio Servicio Penitenciario", y denunció que esa situación es "preocupante frente al juicio oral que comenzará la semana próxima contra el ex capellán de la Policía, Christian Von Wernich, que así se hará en un contexto de incertidumbre y de impunidad".

López, un militante de la unidad básica que había sido secuestrado el 27 de octubre de 1976 por una patota encabezada por el ex comisario Etchecolatz, permanece desaparecido desde el 18 de septiembre pasado, cuando se ausentó de su casa de Los Hornos, justo cuando estaba por encontrarse por primera vez cara a cara con el represor que lo torturó, un día antes de la sentencia.