En el cierre del encuentro organizado por el PJ provincial, el jefe de los ministros dio un discurso en el que hizo hincapié en la necesidad de proteger los recursos estratégicos de la Argentina y los países de América latina, al tiempo que denunció los intentos de injerencia de las grandes potencias.

"No es casualidad que la primera potencia del mundo se haya inmiscuido en todos los países para desestabilizarlos", dijo en referencia implícita a lo que está sucediendo en Venezuela, donde el gobierno local denunció la injerencia del país del norte. "Por eso -añadió- tenemos que hablar aquí de lo que pasa en el planeta, para que todos tomemos conciencia de lo que ocurre, tenemos que ser capaces de defender nuestras ideas, nuestros recursos, nuestros trabajadores y nuestro trabajo, nuestros empresas y empresarios."

Instó a levantar las banderas de Perón y Evita, "tal como lo hicieron Néstor y Cristina (Kirchner), para alcanzar tres desafíos: lograr el autoabastecimiento energético; seguir apostando a la industrialización acelerada y garantizar la estabilidad macroeconómica". Para alcanzar esos objetivos, convocó al movimiento peronista a reencontrarse con la doctrina y la ideología del Justicialismo, resaltando a esas bases como "el hilo conductorö del ômovimiento", y apelando a "volver siempre al brebaje ideológico de la doctrina peronista en la esencia más pura de sus valores".