Según la OMS, cada año se producen unos 440.000 casos nuevos de tuberculosis multirresistente que causan al menos 150.000 muertes, y el índice mundial de mortalidad por infecciones crece. El uso inadecuado e irracional de los antimicrobianos, ya sea por mal diagnóstico e indicación o por ineficaz tratamiento y cumplimiento terapéutico, crea condiciones favorables para la aparición, propagación y persistencia de microorganismos resistentes. La farmacorresistencia, en particular la resistencia de bacterias, virus y parásitos, trae como consecuencias: enfermedad prolongada, el riesgo de muerte y mayores costos de salud. Este problema no viene acompañado por un paralelo desarrollo de nuevos agentes antimicrobianos. ¿Qué debemos hacer? Promover acciones preventivas para asegurar adecuadas prácticas higiénicas, empezando por el lavado de manos; un uso racional y adecuado de medicamentos; evitar, y reducir, la propagación de infecciones e instaurar medidas de control sobre el uso de antibióticos en la cría de animales destinados al consumo humano.

Combatamos la resistencia a los antimicrobianos: si no actuamos hoy, mañana no habrá cura.

Dr. Damián Pablo Ballester

DNI 16.939.044