El argentino Lionel Messi, máxima figura de Barcelona, marcó ayer el segundo gol de su equipo, que goleó a Athletic de Bilbao por 4-1, en Valencia, y ganó la 25ª Copa del Rey de su historia y el primero de los tres títulos que tiene chances de ganar en la presente temporada.

Messi, quien fue titular y jugó su segunda final con Barcelona (perdió en 2006 la Supercopa de Europa), anotó la segunda conquista de su equipo a los diez minutos del segundo tiempo. Los otros goles de Barcelona, dirigido por Josep Guardiola, fueron marcados por el marfileño Yaya Ture, a los 31 minutos de la primera etapa; Bojan Krkic y Xavi Hernández, a los 13 y 19 del complemento, en tanto que Giazka Toquero abrió el marcador para Athletic de Bilbao, a los 9 del primer tiempo.

Con la victoria ante el conjunto vasco, Barcelona se desquitó de la final de la Copa del Rey que Athletic de Bilbao le ganó en 1984, en lo que fue el último partido de Diego Maradona en el equipo catalán, cuando perdió por 1-0, en Madrid.

Además de la Copa del Rey, Barcelona lidera la liga española con ocho puntos de ventaja sobre su escolta Real Madrid –último bicampeón–, cuando quedan tres fechas por disputarse y, además, el próximo 28 de mayo disputará frente al Manchester United, de Carlos Tevez, la final de la Champions League.

En medio de la celebración por el título, el técnico catalán, Josep Guardiola, no se guardó elogios para el rosarino, el mejor jugador del partido. “Lo que diferencia a Lio del resto de los jugadores es que estos partidos son los suyos. Le gusta jugarlos, le encanta. Es un lujo para el Barça poder tener un jugador como Lio”, señaló el entrenador, que está debutando en el equipo en esta temporada.