El Rally de Argentina cumple tres décadas y lo celebra con una competencia especial. Ya un clásico en Córdoba, donde se disputaron 26 de las 29 ediciones desde la primera de 1980, esta vez no forma parte del Mundial de Rally –como estaba previsto–, sino del IRC, un mundial “paralelo” de la Federación Internacional. No estarán en Calamuchita o Punilla un monstruo como Sebastien Loeb –ganador de las últimas cinco ediciones– o las poderosas máquinas de 300 HP, pero por primera vez en muchos años un piloto argentino dispone de una chance palpable de victoria, lo que no sucede desde que el inolvidable Jorge Recalde ganara los rallies de 1988 y 1995. El cordobés Federico Villagra, el mejor piloto de rally del país, es uno de los candidatos a la victoria en esta prueba que se pone en marcha hoy, a las 17, con un superespecial por la costanera del Lago San Roque, en Villa Carlos Paz.

Acostumbrado al poderoso Focus WRC que conduce en el Mundial de Rally –viene de ser séptimo en México, a comienzos de mes–, Villagra esta vez conducirá un Ford Fiesta S2000 similar al que condujo Mi-kko Hirvonen, el subcampeón mundial, para ganar el pasado Rally de Montecarlo, prueba inicial del IRC 2010. “Tiene una sustancial diferencia de potencia con respecto al WRC, pero dobla y frena de manera impecable”, cuenta el nueve veces monarca argentino de rally.

Sus rivales más importantes serán el príncipe de Qatar, Nasser Al A-ttiyah –casi un cordobés más–, que viene de ser segundo en el Dakar de enero y pretende el título del IRC, y el norirlandés Kris Meeke, actual campeón, que ganó el Rally de Brasil dos semanas atrás y corre un Peugeot 207. El equipo oficial Skoda también puede ser protagonista; Juha Hanninen, su mejor piloto, es líder del IRC.

Lo interesante de este rally es que, sin turbocompresor, estos autos Super 2000 tienen rendimientos similares a los coches del Grupo N que se utilizan habitualmente en el Campeonato Argentino. Así, experimentados como Gabriel Pozzo (Subaru) o el ex socio de David Nalbandian Marcos Ligato (Mitsubishi) albergan la esperanza de pelear un lugar en el podio. Por eso, aunque no cuenta para el Mundial, este 30º Rally de Argentina tiene todos los ingredientes para ser una prueba emocionante.