Los juveniles de River Facundo Affranchino y Roberto Pereyra ingresarán en el equipo titular para visitar mañana a Huracán, por la segunda fecha del Apertura, confirmó ayer el director técnico Angel Cappa. Ambos ocuparán un lugar en la mitad de la cancha en lugar de Walter Acevedo y Manuel Lanzini con el objetivo de lograr “más velocidad y movilidad”, según explicó el entrenador. “Quiero que ocupemos la cancha y podamos jugar mejor. Creo que ellos le van a dar más velocidad y movilidad al equipo. Esa es la idea, vamos a ver si sale”, amplió.

Affranchino, entrerriano de 20 años, debutó en Primera División en 2007, jugó 16 partidos y marcó un solo gol, que sirvió para un triunfo en un clásico ante San Lorenzo. Pereyra nació en Tucumán el 7 de enero de 1991, disputó ocho partidos entre los mayores y no convirtió tantos.

Por otra parte, Cappa confirmó que el defensor central Alexis Ferrero se mantendrá en el equipo, tras recuperarse de una molestia física que lo puso en duda para este encuentro. De esa manera, el paraguayo Adalberto Román, una de las nuevas caras del equipo, aguardará por su debut en el banco de los suplentes. El equipo de River para visitar a Huracán será con Carrizo; Ferrari, Ferrero, Maidana, Arano; Affranchino, Almeyda, Pereyra; Ariel Ortega, Diego Buonanotte; y Rogelio Funes Mori.

A su vez, Cappa le reclamó ayer al presidente de Huracán, Carlos Babington, el pago de una deuda, cuya mitad había sido donada al Hospital de Pediatría Garrahan, en contestación a las críticas recibidas por el dirigente. El ex ayudante de campo de Jorge Valdano en el Real Madrid recordó que la dirigencia adeuda “dos meses” de su paso por Huracán y puntualizó que “no tiene la intención de pagar”. Igual, aseguró que no lo reclamará. “No le voy a hacer juicio al club, no me interesa. Pero uno de esos dos meses era para el Hospital Garrahan y no cumplieron. Espero que lo hagan pronto, lo necesitan”, replicó el técnico, subcampeón con Huracán en el Apertura 2009.

Babington declaró su molestia con el entrenador por la forma en la que se desvinculó del club –después de perder un clásico con San Lorenzo, de local– y avisó que no lo saludará cuando River se presente en el Tomás Adolfo Ducó. “Me quedo con el cariño de la gente, de los jugadores y de mis compañeros de trabajo”, dijo Cappa, quien después de renunciar en Huracán siguió al equipo desde la platea, gesto que molestó a Babington.

Y sobre el duelo de mañana, Ca-ppa descartó efusividad en el festejo de un eventual gol de su equipo. “No soy de gritar los goles y mucho menos contra Huracán”, adelantó el entrenador.