“Hay técnicos que toman decisiones si los resultados no se dan. Cada uno sabe lo que hace y hasta dónde puede”, deslizó ayer el vicepresidente segundo de Independiente, Hugo Barrueco, en lo que sonó a un tácito pedido de renuncia al técnico Daniel Garnero si al equipo no lo favorece el próximo partido contra Newell’s. El arquero Adrián Gabbarini salió a bancar al entrenador: “El hace todo lo posible para que esto mejore, pero si las cosas no se dan, la responsabilidad no es toda suya”.

Luego de la derrota del pasado domingo, que dejó a Independiente en la última posición del campeonato y desató una catarata de reproches, Garnero había defendido a la dirigencia, al presidente Julio Comparada y al manager César Luis Menotti, al señalar que los hinchas “no tienen derecho a insultar”. No obstante, Barrueco se mostró sin intenciones de devolverle el apoyo a Garnero. “Espero que la situación mejore y después veremos cómo se van dando las cosas”, apuntó el dirigente.

Lejos de la postura de Barrueco, Gabbarini defendió al entrenador y aclaró que él no emitirá ningún tipo de reproche para la actual dirección técnica: “No va a salir nunca de mi boca algo que tenga que ver con los cuestionamientos al DT”. Por otro lado, el arquero también señaló que los responsables de este presente son los jugadores que “están adentro de la cancha” y asumió que Independiente “no sabe bien a qué juega”, a diferencia de Arsenal. “Ellos sabían que si aguantaban 20 minutos, la gente se nos iba a tirar en contra”, reflexionó.

El domingo quedó claro que la hinchada perdió el respeto que tenía por Menotti, debido a que fueron mal recibidas las declaraciones que efectuó el manager, en las que se desligó de la salida de Américo Gallego: “Mi función es asesorar y opinar cuando me consultan, pero no estoy para echar o poner técnicos”. Con el rumbo perdido en el Apertura, la continuidad de Garnero parece depender del andar de Independiente en la Copa Sudamericana.