El dolor de los basquetbolistas argentinos tras la caída ante Lituania puede sintetizarse en una frase de Carlos Delfino. “No sé si podré dormir en toda la noche, nunca hemos tenido una derrota así en todo el proceso”, afirmó el apesadumbrado santafesino. “Lituania hizo el trabajo que más le convenía, nos pechó de entrada y nos sacó de la cancha. Nos encontramos con un equipo que no falló y muy parejo. Nunca estuvo tan efectivo en todo el torneo”, se lamentó el goleador del partido, que marcó 25 puntos. “Fueron los dos extremos –concluyó Delfino–. Nosotros estuvimos muy errados.”

Fabricio Oberto mostró el mismo abatimiento. “Tengo que digerir este momento”, dijo el cordobés, incapaz de pensar en el partido de hoy, contra Rusia, para poder pelear por el quinto lugar en el Mundial. “Lo que caracteriza a este equipo es que estamos orgullosos de jugar con nuestra selección. El Mundial no está acabado, seguiremos jugando”, intentó sacar pecho el pivote, que le dedicó un elogio al vencedor del partido de ayer en Estambul. “Han jugado increíble, no pudimos ajustar nuestro juego a esa calidad y talento, jugaron mejor”, admitió. “En otros momentos nos tocó disfrutar el jugar por cosas importantes y ganarlas, esta vez tocó esto y hay que afrontarlo igual.”

Luis Scola, la figura del equipo argentino en el Mundial, demostró resignación ante la evidencia de la derrota. “No hay nada que hacer sobre eso, porque demostraron ser mejores. Podíamos pensar en la previa que sería diferente, pero demostraron que no es así y debemos aceptarlo.” El pivote de los Houston Rockets rescató lo “bueno que el equipo siguiera luchando aun cuando era evidente que no podríamos dar vuelta el marcador, pero es lo mínimo que podemos hacer cada vez que salimos a la cancha. Este grupo no entiende otra forma de jugar que no sea ésa”.

Leo Gutiérrez intentó escaparle a la depresión renovando el objetivo, porque “esta generación no está terminada”, opinó, reclamando que “el año próximo en el Preolímpico de Mar del Plata se buscará la clasificación para Londres 2012”. Según Gutiérrez, “estaremos con (Emanuel) Ginóbili y (Andrés) Nocioni y buscaremos la clasificación para Londres. Allí estaremos todos para darle otra alegría al básquetbol argentino”, apuntó. “Este grupo es muy unido en las buenas y en las malas. Nos tocó perder y quedarnos sin las semifinales, pero lucharemos para lograr la mejor posición final posible”, señaló.

Pablo Prigioni mostraba su incredulidad tras la derrota. “La verdad es que me imaginaba un montón de situaciones, pero ninguna como lo que pasó –admitió–. Lituania jugó al límite, nos marcó muy bien y nos sacó de la cancha. Nos cortó nuestras armas ofensivas y tuvieron un acierto tremendo.” El base del Real Madrid abogó por la recuperación. “Debemos honrar esta camiseta y olvidarnos de este golpe. Salir motivados mañana (por hoy) para tratar de terminar lo más arriba posible.”