Estudiantes no pudo ofrecer el nivel habitual en su excursión por Victoria, y perdió ante Tigre mostrando un juego deslucido. Con paciencia, como todos los partidos que encara el puntero. Así comenzó un encuentro en el que Tigre se mostró más decidido, firme y con la intención de abrir el marcador. Eso se percibió desde el arranque, cuando la pelota parada en los pies de Román Martínez fue la jugada a la que los locales se aliaron para intentar superar a su rival.

Pero Estudiantes suele hallarse en esas circunstancias en las que en un principio lo dominan, pero que con el correr del reloj sabe encontrar los caminos para torcer la dirección.

Y así sucedió, porque más allá de la buena proyección de los dirigidos por Caruso Lombardi, el líder del campeonato solidificó su esquema y tuvo las chances más claras. A los 13 minutos, un pase preciso de Leandro Benítez dejó solo a Marco Rojo ante el arquero, pero el volante definió fuerte y desviado. Poco después, un tiro libre de Juan Sebastián Verón hizo lucir a Daniel Islas. Sin superar la igualdad, ya Estudiantes hacía pesar su calidad.

Pero cuando peor la pasaba, fue Tigre quien modificó el resultado. A los 24 minutos Denis Stracqualursi realizó un movimiento y habilitó frente al arco a Fernando Telechea. El delantero remató sin decisión y la pelota rebotó en la defensa para quedarle mansa a Diego Morales, que venció al arquero Taborda. La ventaja era para el local cuando menos lo merecía.

Con el resultado a favor de los de Victoria, el fútbol se desvaneció y el partido fue más friccionado y peleado que bien jugado. Sin ideas, a Estudiantes hasta ese momento no le alcanzaba sólo con la paciencia.

El desarrollo del juego cambió en el inicio de la segunda parte, debido a que cuando se jugaba apenas un minuto, Román Martínez se fue expulsado por una infracción fuerte. A partir de ahí, Estudiantes se lanzó en busca de la igualdad, y comenzó a desnivelar por los costados. En uno de esos desbordes, Benítez se fue por la izquierda, envió la pelota al área, y el ingresado Peñalba definió al lado del palo.

Pero esa búsqueda del visitante tuvo su premio a los cinco minutos. Mercado se desprendió por la derecha, lanzó el centro, y Benítez convirtió pegándole de volea. Los platenses no se conformaron y siguieron atacando. Mercado tuvo una chance pero la tiró por arriba. Tigre sólo apostaba a un contraataque, y lo encontró con una acción iniciada por Botta, quien habilitó a Stracqualursi, y éste convirtió con un derechazo. La pelota rozó en un defensor y descolocó al arquero. A esa altura, Estudiantes no tenía la claridad necesaria para llegar con riesgo, y el local estuvo cerca del tercero.