Arsenal y All Boys tienen características similares, ya que ambos suelen correr desde atrás y utilizan el contragolpe como principal argumento. Al enfrentarse ayer en Sarandí, ninguno de los dos equipos se hizo cargo de asumir la iniciativa e igualaron sin goles, en un encuentro deslucido, que tuvo contadas situaciones de riesgo. Con este empate, Arsenal quedó a cinco puntos del líder Estudiantes y perdió la chance de igualar transitoriamente la línea de Vélez.

El primer tiempo fue pobre, ya que All Boys tuvo la pelota pero no logró lastimar, mientras que Arsenal nunca encontró por donde entrar, a pesar del buen manejo que poseen la mayoría de sus jugadores. Dentro de ese panorama tan chato, lo más rescatable fue una aparición de Leguizamón, quien definió por arriba del travesaño cuando había quedado mano a mano con Cambiasso.

Arsenal arrancó la segunda mitad decidido a buscar la victoria, con pelotazos profundos por la derecha para Franzoia y Leguizamón, a espaldas de Soto. No obstante, con el correr de los minutos, Sánchez y Barrientos se adueñaron de la mitad de la cancha, cortándole el ritmo vertiginoso al equipo de Sarandí. Cuando ninguno de los dos llegaba con claridad, Matos conectó un centro de Rodríguez y estrelló la pelota en el travesaño, en lo que fue la chance más clara de un partido para el olvido.