Jueves, 6 de enero de 2011 | Hoy
DEPORTES › RIVER RETORNó A LAS PRáCTICAS CON UNA AUSENCIA USUAL
El jujeño adujo una colitis y el entrenador Juan José López le pidió un informe al médico del plantel. “Sin disciplina no se puede trabajar”, se quejó el DT, que se la banca si no le traen ningún refuerzo. “Estamos bien cubiertos.”
Lo que debía ser un regreso al trabajo muy tranquilo terminó en un nuevo foco de conflicto en River. Ariel Ortega no se presentó al primer día de la pretemporada por una supuesta gastroenterocolitis y motivó que el entrenador Juan José López pidiera un informe al médico del plantel, Luis Seveso, para conocer el estado de Ortega. Y por las dudas, ya avisó que no tolerará actos de indisciplina.
La ausencia de Ortega alteró la serenidad de River en el inicio de la pretemporada. De acuerdo con la información oficial, el delantero sufrió un cuadro de gastroenterocolitis, por lo que Seveso le iba a presentar el informe a López, para que el entrenador resolviera la situación. Sin embargo, el técnico dejó en claro que no estaba muy convencido de que la afección del jujeño fuese real. “Tengo que esperar el informe del doctor, después hablar con Daniel (Passarella) y después charlaré con Ariel. Como cuerpo técnico queremos que haya disciplina y que todos tengamos los mismos objetivos. Sin disciplina no se puede trabajar”, resaltó el entrenador.
Ante esa situación, para hoy se espera la presencia de Ortega en el entrenamiento, con la idea de que el conflicto no se agrave. Mientras tanto, el entrenador se reunirá con el presidente Daniel Passarella para resolver si el jujeño será tenido en cuenta y viajará con el resto de sus compañeros a la pretemporada en Mar del Plata. Ortega no se concentró en los últimos partidos del Apertura, por lo que su ausencia volvió a encender las alarmas en Núñez. “Yo estoy para trabajar y colaborar con el plantel en todos los aspectos. Trataremos de hacer lo mejor posible y necesitamos a los jugadores de la mejor manera para tener una mejor convivencia de grupo”, remarcó López, que sabe que resolver este conflicto será vital para las posibilidades futuras de River.
Más allá de este problema, el técnico trató de minimizar otros inconvenientes, como el pedido de Diego Buonanotte de ser transferido o la falta de refuerzos para encarar el Clausura. Jota Jota charló con todos los jugadores y les aclaró que si alguien no está de acuerdo tiene que avisar ahora y bajarse del proyecto. “Todos los que se presentaron están a mi disposición. Yo hablé con ellos y les dije que si no tienen la voluntad de seguir que me lo digan a mí o vayan a hablar con el presidente. No hay ningún problema”, indicó López, que también le hizo un guiño a Passarella al asegurar que no necesita ningún refuerzo si no se va ningún futbolista. “Si no se vende ningún jugador, estamos bien cubiertos en todas las posiciones”, indicó el técnico.
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