DEPORTES › NO VA A PROTESTAR EL PARTIDO QUE PERDIO EN ECUADOR

River se va a quedar en el molde

Los dirigentes eligieron bancársela y tratar de recuperar en la cancha el terreno perdido. Las cuentas todavía le sonríen: si gana los dos partidos que le restan jugar como local, no tendría problemas en clasificarse a la segunda fase de la Copa Libertadores.

No habrá protesta. A pesar del escandaloso partido que River perdió ante Emelec en la noche del jueves, los dirigentes del club argentino no tienen pensado elevar una protesta ante la Confederación Sudamericana de Fútbol. “Los partidos se ganan y se pierden en la cancha”, comentó un dirigente, para explicar la política que tomará River ante los acontecimientos ocurridos en Ecuador. El plantel viajó ayer a Santiago de Chile, donde pasaba la noche, y hoy arribaba a Buenos Aires, pensando ya en el partido de mañana ante Estudiantes. Los medios ecuatorianos se hicieron eco de los incidentes, aunque en algunos diarios también se burlaron de la actuación de River.
Los dirigentes de River quedaron con mucha bronca por lo sucedido el jueves en Guayaquil. Un botellazo que le pegó en el hombro al arquero José María Buljubasich en el momento previo al segundo gol de Emelec y la presencia de muchos particulares que se metieron en la cancha para celebrar los tantos del conjunto local y burlarse de los jugadores argentinos motivaron las mayores críticas. Tan irregular fue todo lo que se produjo que los hinchas locales incluso agredieron a sus propios jugadores, cuando un plateísta arrojó un petardo a la cancha que dejó aturdido a tres integrantes del banco de suplentes. Marlón Díaz, Juan Triviño y el arquero suplente Aragón debieron ser atendidos luego de la fuerte explosión.
“Volvimos a la Copa Libertadores de los años 70, signada por la violencia. Lo que pasó en el segundo gol fue increíble”, señaló el directivo Antonio Larregina, que además dejó en claro la intranquilidad que les produjo la situación. “Nos preocupa lo ocurrido, pero no vamos a protestar y nos la aguantamos. Creo que no es necesario protestar nada porque todos vieron lo que pasó. Nuestra filosofía es que los partidos se ganan y se pierden en la cancha”, dijo Larregina a la radio La Red.
Pese a la derrota, River sigue dependiendo de sí mismo para clasificarse, y si gana sus compromisos como local no debería tener inconvenientes para avanzar a la segunda fase. Venciendo a Deportivo Cali la semana que viene y a Emelec en la última jornada, ambos en el Monumental, el equipo de Manuel Pellegrini llegaría a nueve puntos. Eso sin tener en cuenta el partido ante Libertad en Paraguay. En ese caso, Emelec debería vencer a los paraguayos el martes que viene y además derrotar a Deportivo Cali para superar a River. Algo más que improbable teniendo en cuenta que el Cali goleó 4-0 en su visita a Guayaquil. Para Libertad, el panorama es más complicado todavía. Con un sólo punto en tres partidos, el equipo de Gerardo Martino debería ganar sus tres compromisos para llegar a 10 puntos y poder pasar a River.
Los medios ecuatorianos no pasaron por alto los incidentes que sucedieron en el estadio Capwell de Guayaquil. “Poco antes de que Emelec anotara su segundo gol, una botella golpeó al arquero Buljubasich, que pedía la intervención del árbitro cuando el balón disparado por Rey ingresaba en su arco”, consignó el diario El Comercio. “Hubo varios incidentes, que motivaron la intervención de elementos de la Policía Nacional”, señaló El Universo. En cambio, Extra de Guayaquil prefirió la burla para comentar lo ocurrido: “Las gallinas de River Plate fueron pisoteadas en la cancha de la Caldera, principalmente con un luminoso segundo tiempo para el bicampeón”.

Compartir: 

Twitter

Manuel Pellegrini todavía tiene motivos para ser optimista en la Copa Libertadores de América.
Asegurándose la victoria en los dos partidos que le quedan como local, River pasa a la segunda fase.
 
DEPORTES
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.