El técnico del seleccionado argentino masculino de vóleibol, Javier Weber, comentó que se lleva una buena impresión de la actuación de su equipo en los Juegos Olímpicos y destacó que desde la capital británica se van “sabiendo lo que hay que hacer” en el futuro inmediato. Luego de la derrota 3-0 (25-19, 25-17 y 25-20) ante Brasil, que lo dejó al margen de las semifinales de la competencia, el entrenador sostuvo: “De acá (Londres) nos vamos sabiendo lo que hay que hacer”. “Somos conscientes del camino que hay que tomar para seguir creciendo. Estos chicos son oro en polvo”, expresó el técnico, una vez finalizado el primer duelo de cuartos de final en Earls Court.

Weber explicó que el crecimiento del equipo argentino pasará “por sostener un rendimiento de ataque”. “Hoy la Argentina está entre los ocho mejores del mundo, pero no entre los cuatro. A eso hay que apuntar”, resumió. El técnico consideró que el balance general del rendimiento del equipo “es más que satisfactorio, independientemente de lo de hoy (ayer), en donde hubo una notoria diferencia de ataque en favor de Brasil”.

“Me voy orgulloso por cómo rindió el equipo. Es un ciclo que ha ido creciendo. Cuando nos hicimos cargo, Argentina estaba decimoséptimo en el ranking mundial, hoy creo que vamos a quedar séptimos”, aclaró. “Hay un equipo que ilusiona, con muchos pibes, es cierto. Ponerlos a todos juntos no fue fácil. Pero respondieron excelente y sé que seguirán creciendo”, amplió.

El contrato de Weber finalizó ayer, con la eliminación del equipo en Londres, aunque el propio técnico se esperanza con la posibilidad de seguir cuatro años más: “Soy muy respetuoso de lo firmado, mi contrato termina hoy. Pero tengo ganas y fuerzas como para seguir y encarar el proceso que lleva hacia Río de Janeiro 2016”, finalizó.

El encuentro de ayer arrancó con cierto equilibrio. En el primer tiempo técnico, la ventaja brasileña era mínima (8-7). De a poco, el bloqueo del equipo brasileño comenzó a ser efectivo, del mismo modo que los ataques de Dante y Lucas, quienes causaron mucho daño en la red.

El desconcierto argentino se profundizó en el último tramo del primer parcial, y Weber decidió el cambio de armador: Uriarte por De Cecco. Pero Brasil continuó con el envión necesario como para llevarse el parcial, en apenas 26 minutos. El segundo set empezó como el primero: con dos equipos alternándose en el dominio y en el tanteador. Pero al llegar a la mitad, Brasil nuevamente prevaleció y dominó el segmento hasta conseguirlo.

En el tercero, Argentina pudo tomar una distancia de 3-1 en el arranque, pero la aparición de Murilo (una de las figuras; 10 puntos) niveló las acciones. Argentina equilibró con el regreso de De Cecco, pero Brasil siguió apostando al armado de Sergio, a la potencia de Wallace y redondeó el éxito con un parcial de 25-20, tras 23 minutos.