DEPORTES › AMERICA DE CALI GANO EN LOS PENALES Y PASO A CUARTOS
Racing padeció su martes 13
Racing dominó todo el partido pero careció de precisión –al principio– y de claridad –al final–. Rueda falló en el penal definitivo.
La doble falla del goleador Luis Rueda al malograr dos tiros penales dejó a Racing anofuera de la Libertadores en octavos de final, al perder 6 a 5 en la definición desde los doce pasos, después de empatar 0 a 0 en los 90 minutos. El partido de ida jugado en Colombia había finalizado igualado en un tanto, por lo que la paridad obligó a este final en que todos convirtieron menos “el más acostumbrado” a hacerlo. Racing había hecho méritos para ganar. Pero no pudo ser. Ahora, el América espera rival en cuartos: River o Corinthians.
Racing llegaba en teoría mucho más aliviado a esta instancia que River y Boca, obligados a definir afuera y contra los temibles brasileños, además de no tener más obligaciones en el Clausura. Pero no fue así. Anoche Racing fue el del torneo local de los últimos tiempos durante el período inicial y el de comienzos de ese certamen y la Copa en la parte final. En los 45 minutos iniciales los de Ardiles dividieron la pelota en la mitad de la cancha, carecieron de precisión en ataque y dieron algunas ventajas defensivas que no supieron aprovechar los colombianos. En el segundo período apareció el equipo pujante de los buenos momentos pasados inmediatos, aunque le siguió faltando el fútbol que solían generar con fluidez Peralta, Mariano González, Milito y compañía. Además, el casi siempre eficaz Luis Rueda ayer se enredó y desaprovechó cada vez que tuvo una situación favorable ante el seguro Zapata.
Por eso la figura del local fue Bastía, ya que no solamente presionó en el medio sino que también llevó a Racing adelante, pero sin claridad ni con jugadas elaboradas. Y de hecho esto fue lo que le sucedió a un Racing que tuvo sus oportunidades pero nunca el paso ganador que había motivado a su hinchada por el buen fútbol que desplegaba.
Lamentablemente, ahora perdió todo: tres partidos seguidos en el Clausura que desmoralizaron a su gente –no se la vio muy expresiva en el Cilindro– y ahora, la Copa.
Así las cosas, el América de Cali se encontró con un triunfo basado en el orden defensivo, el trabajo sin fallas de Zapata, el manejo y la combatividad de David Ferreira, algún chispazo de Jairo y la efectividad en los penales. Les alcanzó para seguir adelante.