DEPORTES › BOCA PIENSA EN CHACA, PERO LE APUNTA A COBRELOA
Cascini y el Melli, reservados
Boca regresó y ya trabaja para jugar mañana. Tras la tormenta que desataron sus quejas por el horario, Bianchi calla, rota y elige.
Boca regresó ayer de Chile luego de vencer 2-1 a Cobreloa por la Copa Libertadores y ya tiene en la mira el encuentro de mañana ante Chacarita, por la decimotercera fecha del torneo Clausura de fútbol. En ese marco, Guillermo Barros Schelotto y Alfredo Cascini quedaron ayer al margen de la concentración del plantel, ya que el técnico Carlos Bianchi decidió preservarlos para la revancha del próximo miércoles ante los chilenos. Una vez más, el entrenador volverá a rotar jugadores entre los dos certámenes, para compensar el desgaste físico de varios futbolistas.
Ambos jugadores quedaron al margen de la concentración en el Hotel Intercontinental, luego del entrenamiento vespertino realizado en el complejo de Casa Amarilla.
El plantel arribó a las tres de la madrugada de ayer al aeropuerto de Ezeiza, en un vuelo charter, y de inmediato se dirigió a la concentración. Los jugadores que el miércoles pasado le ganaron a Cobreloa solamente efectuaron ejercicios regenerativos, mientras que el resto realizó una práctica de fútbol. “El descanso es una decisión que tomó el técnico para que esté en buenas condiciones para enfrentar a Cobreloa”, expresó ayer por la tarde Barros Schelotto. Y agregó: “El partido de ayer (por el miércoles) fue muy duro. Aunque me gusta hacer goles, lo importante es que el equipo gane. Porque de nada vale anotar si después no se logran resultados en estos cotejos donde cada punto vale oro”.
Pero más allá del triunfo, Barros Schelotto todavía es cauteloso con la definición de la serie: “Atención que solamente ganamos 90 minutos y todavía falta el resto. No debemos pensar que ya estamos clasificados. Ni siquiera pensamos en River, porque ellos primero tienen que pasar un partido muy difícil en Colombia”.
Por su parte, Cascini también confió que “la victoria de ayer (por el miércoles) fue muy importante porque se logró ante un gran rival. Pero sabemos que todavía nos queda un partido por delante y no pensamos que ya estamos clasificados”. Pareciera que ciertas dificultades que debió remontar Boca cuando debió definir de local no han sido, saludablemente, olvidadas.