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“Hay que estar a la altura de las circunstancias”, comentó frente a las cámaras televisivas una vez que finalizó la reunión con los senadores del bloque peronista en la Cámara alta. El vicepresidente electo, Daniel Scioli, estaba hablando de “las expectativas” de la población frente al nuevo gobierno. El encuentro de ayer fue su segunda presencia en el Senado. En esta ocasión la reunión fue con los integrantes de la bancada oficialista. Acompañado por el titular del cuerpo, el sanjuanino José Luis Gioja, y por el presidente del bloque, el rionegrino Miguel Angel Pichetto, el vicepresidente adelantó que la futura agenda parlamentaria “debe privilegiar la generación de empleo”.
Durante un poco más de una hora, Scioli analizó con los senadores del peronismo cuestiones operativas sobre la marcha del cuerpo. Aunque no estaban todos, había representantes de todas las corrientes internas. Por el menemismo, dijeron presente Eduardo Menem y el salteño Marcelo López Arias. Entre los seguidores de Adolfo Rodríguez Saá estaba la puntana Liliana Negre de Alonso. Aunque Cristina Fernández de Kirchner no fue de la partida ya que en ese momento descendía con su marido Néstor de la avioneta que los trajo desde Santa Cruz, se encontraba presente el senador santacruceño Nicolás Fernández.
“Vine a expresar mis ideas sobre esta nueva etapa”, adelantó Scioli al entregar su conclusión del cónclave. Cuando se le preguntó por la agenda legislativa que le preocupa al futuro gobierno, sostuvo que priorizarán “la acelaración de los procesos productivos, generación de empleo, y la lucha contra la pobreza”.
Gioja se limitó a decir que “a la Argentina le iba a ir bien si a Kirchner le iba bien”. Un poco más explícito, Pichetto adelantó que “el peronismo se iba a encolumnar detrás del presidente Kirchner”. A la hora de hablar de la bancada que preside, aseguró que “a pesar del proceso electoral que llevó a la existencia de tres candidatos peronistas, el bloque siempre estuvo unido, como ahora está unido detrás del presidente”.
Pichetto avanzó sobre algunos temas parlamentarios pendientes de resolución como el denominado ITC, impuesto de transferencia a los combustibles y otros proyectos económicos. Cuando se le preguntó por las objeciones que el Fondo Monetario Internacional le habría hecho llegar al ministro de Economía, Roberto Lavagna, por las postergación que el Parlamento hizo de las ejecuciones hipotecarias en los casos de vivienda única, Pichetto, se limitó a repetir: “El Congreso ya dio su opinión”.
Aunque en público Scioli insistió con la necesidad de que el Senado tenga “una presencia permanente en las provincias”, en privado con los legisladores no avanzó en cómo concretar esta iniciativa. Por lo pronto las principales decisiones deberán esperar hasta la semana que viene. Fecha en la que se contempla la reunión del presidente Kirchner con los parlamentarios. Allí el gobierno desgranará algunas de sus prioridades legislativas.
Pichetto adelantó algunas de las preocupaciones de los senadores. Así fue que comentó que “citarán al futuro secretario de Seguridad”. Incluso manifestó cierta complacencia en que la designación, tal como algunas versiones sostienen, recaiga en el fiscal Norberto Quantín (ver página 12).
El tono general de las declaraciones posteriores al encuentro tuvo el tinte positivo que suele imprimir Scioli a sus discursos. Así como el futuro gobierno se precia de estar viviendo una luna de miel con la opinión pública, los legisladores justicialistas no quieren, por el momento, aparecer como los terceros que pongan ese romance en discordia.