Juan Román Riquelme contestará el martes próximo si acepta la propuesta de jugar en Tigre el torneo Final y la Copa Libertadores, cuando mantenga la segunda entrevista con el intendente de ese partido, Sergio Massa, quien dirige los destinos del club de Victoria. En el club estiman que hay muchas chances de que el volante acepte el ofrecimiento.

De acuerdo con lo que informó una fuente del club a la agencia Télam, no es cierto, tal como se especuló por la mañana, que el ex mediocampista de Boca ya haya aprobado su incorporación en una supuesta reunión de su representante, Daniel Bolotnicoff; con Massa; con el presidente del club, Rodolfo Molinos; y el vice, Ezequiel Melaraña. Y también desestimó que en la primera entrevista, el pasado jueves en la casa del intendente, Riquelme exigiera el pago mensual de 150.000 dólares como salario. “Es cierto que pidió un sueldo en dólares pero sorprendió para bien el monto porque, de hecho, ganaría menos que el mejor jugador pago del plantel, que cobra unos 200.000 pesos”, contó la fuente. Cuando el futbolista reveló el monto de lo pretendido, la dirigencia de Tigre se convenció de que “quiere jugar sí o sí” en el equipo de Néstor Gorosito.

Una vez que se resuelvan los detalles que restan entre Riquelme y Tigre y que el jugador acepte la propuesta, su representante deberá destrabar su salida legal de Boca. Una chance sería recurrir a la Justicia laboral para lograr la libertad de acción, teniendo en cuenta que desde hace siete meses no juega ni cobra. Sin embargo, si bien la intención no es pagar los 2,1 millones de dólares que pretende Boca para liberarlo en el mercado local, en Tigre no están muy de acuerdo con esa medida, ya que si Riquelme va a la justicia, los plazos que demandaría esa instancia conspirarían contra la idea de sumarlo pronto. Frente a esa situación, la entidad de Victoria reuniría a través de sus sponsors el monto del resarcimiento, pero la estrategia será intentar que Boca baje sus pretensiones.