El entrenador de River, Ramón Díaz, mantuvo ayer una charla con los dos máximos referentes del plantel, David Trezeguet y Leonardo Ponzio, en la que intentaron sacar conclusiones de la dolorosa derrota por 2-0 ante San Lorenzo y poner el foco en el próximo encuentro, frente a Colón. “Los voy a escuchar toda la semana, pero el viernes hablo yo, ya van a ver, je...”, dijo el riojano al pasar, en tono de broma, una vez finalizado el entrenamiento en Ezeiza.

La charla, de la que también participó su ayudante de campo e hijo, Emiliano Díaz, tuvo lugar en el centro de una de las canchas del predio, donde el plantel retomó ayer los trabajos con tareas regenerativas. El conductor habló primero con Trezeguet, quien no salió a jugar el segundo tiempo del clásico en el Nuevo Gasómetro y sólo marcó un gol en cuatro partidos, y luego dialogó con Ponzio. Díaz, que no podrá estar en el banco con Colón por haber sido expulsado el domingo pasado, se sentó sobre una pelota y conversó durante un tiempo largo con ambos.

Según allegados, no se produjo allí un llamado de atención ni un reclamo por el bajo nivel demostrado ante San Lorenzo, sino que se instó a trabajar en conjunto para no volver a cometer ciertos errores.

El entrenador, por lo que se pudo averiguar, no tiene en mente por ahora hacer muchas modificaciones en el equipo, y sólo Ariel Rojas tiene alguna chance de jugar en la mitad de la cancha. Otra de las novedades de la jornada fue que el defensor paraguayo Adalberto Román volvió a trabajar de manera diferenciada, y esta semana le van a hacer evaluaciones médicas para ver cómo está de la ruptura fibrilar que padece en el aductor izquierdo, y así saber para cuándo podrá ponerse a disposición del técnico y sumarse al equipo.

En ese sentido, el médico del plantel, Rafael Giulietti, aseguró que Román aún no tiene el alta médica para poder jugar frente a Colón. “El jugador está haciendo las tareas de recuperación y le vamos a hacer estudios para ver el estado de la lesión, pero sería un riesgo que juegue porque llega muy justo”, explicó el doctor. Díaz charló ayer con el cuerpo médico para consultar sobre el estado del paraguayo, pero una vez conocida su condición, decidió que se entrene suave con el objetivo de que pueda estar presente ante Newell’s, en Rosario, el 17 de marzo próximo. Román jugó su último partido ante Estudiantes, el 17 de febrero último, en el estadio Monumental, y a partir de allí inició su tratamiento para recuperarse de la lesión.

El plantel volverá a entrenarse hoy a la mañana en el predio de Ezeiza y mañana realizará la práctica de fútbol a puertas cerradas, en la que el técnico elegirá los titulares para enfrentar a Colón.