Daniel Montenegro, capitán de Independiente, aclaró que escaparle al descenso “es difícil, pero no imposible”. “Sigue dependiendo de nosotros”, dijo, y confirmó que continuará en el club pase lo que pase. Además declaró que pone “las manos en el fuego” por los jugadores de Racing, que recibieron amenazas de cara al partido con Quilmes, en cuatro fechas.

Consultado por la situación del equipo, Montenegro admitió que “sabía” que no sería fácil alejar al equipo de los puestos del descenso, y aseguró que continuarán peleando “hasta la última fecha, con Colón”. “Los resultados se van dando, pero no debemos conformarnos con eso, vamos por el buen camino, tenemos objetivos muy claros y esperemos que se cumplan”, agregó.

Además, el mediocampista afirmó que continuará en el club sea cual fuere el desenlace en el torneo, y que por eso firmó un contrato de “un año y medio”. “Sea lo peor o lo mejor, estaré acá para apoyar, voy a dar la cara hasta el final. Me comprometí con esto y acá voy a estar”, remarcó el futbolista surgido en Huracán, campeón con Independiente en el 2002.

Pese a que evitó las comparaciones entre el anterior técnico del equipo, Américo Rubén Gallego, y el actual Miguel Angel Brindisi, Montenegro admitió que luego del partido con Rafaela los jugadores entendieron que debían “cambiar”.

También bajó los humos a la polémica sobre el partido Racing con Quilmes, por la 16ª fecha, cuando dijo que pone “las manos en el fuego” por los jugadores de Racing, y que confía en que “saldrán a ganar” contra Quilmes, a fin de mayo. Aunque faltan semanas para el partido, algunos hinchas de Racing hicieron circular, por páginas web partidarias y por los alrededores del estadio de Racing, pedidos y amenazas al plantel dirigido por Zubeldía para que no hagan fuerza para ganarle a Quilmes, lo que podría complicar a Independiente en la lucha por escapar al descenso.

A pesar de lograr dos victorias, contra Argentinos y Tigre, Independiente sigue en zona de descenso y tiene este domingo un partido complicado contra Lanús.