La definición del título, por un lado, y de los dos descensos que restan concretarse, por el otro, son focos de atención excluyentes en el fútbol argentino, pero en realidad es uno solo, porque ambas definiciones están fuertemente relacionadas, dado que los equipos que disputan uno y otro objetivo se miden entre sí.

Por eso, en la fecha de este fin de semana, la 17ª del torneo Final, ocho de los diez partidos previstos tendrán incidencia en esa definición. Sólo los encuentros que jugarán Vélez y All Boys el sábado y el clásico entre Racing y Boca el domingo no tendrán efecto arriba de la tabla de posiciones o abajo en la tabla de los promedios.

River-Independiente es el partido más importante porque el equipo de Núñez podría volver a la punta del torneo y el de Avellaneda, descender por primera vez en su historia a la Segunda División, en ambos casos si se dan una serie de resultados: en caso de derrota, las victorias de Argentinos y Quilmes lo condenarían automáticamente.

Newell’s (32) se medirá en el Parque Independencia frente al descendido Unión, que viene de ganarle el clásico de Santa Fe a Colón y puede jugar sin nervios ya consumada su suerte.

Lanús (29), que gana desde hace cuatro partidos y que empató sin goles en cinco de sus últimos nueve compromisos, jugará contra Estudiantes, que viene de sacarle un punto a Independiente.

San Lorenzo (27), que se involucró en la pelea por el título tras la derrota de Newell’s contra All Boys, el lunes a la noche, recibirá a Argentinos, que tras la victoria sobre River puso una distancia prudencial sobre Independiente en la tabla de los promedios. Godoy Cruz (27) sigue los pasos de San Lorenzo y recibe a Tigre.

Arsenal (26) alberga chances muy remotas de pelear el título, pero su rival del fin de semana es Quilmes, que si gana el partido se salva definitivamente del descenso.

Al vencer a Tigre en Victoria, San Martín superó a Independiente en la tabla de los promedios, pero todavía está en zona de descenso; recibe a Belgrano, que acaba de clasificarse a la Copa Sudamericana, y necesita ganar por lo menos dos de los tres partidos que le restan para quedarse en Primera.

Rafaela no está matemáticamente salvado del descenso, aunque en una posición más desahogada que Quilmes, Argentinos, San Martín e Independiente, y una victoria sobre Colón le daría la tranquilidad definitiva.