“Soy el primer interesado en ganar la Copa Libertadores, una obsesión que el hincha de San Lorenzo me hace sentir permanentemente. Pero no voy a renunciar al torneo local y quiero dar pelea en los dos frentes”, aseguró ayer el entrenador de San Lorenzo, Edgardo Bauza, en la previa del decisivo choque para la clasificación a la próxima fase de la Copa Libertadores con Independiente del Valle, que se disputará mañana en la ciudad ecuatoriana de Sangolquí, ubicada a 2500 metros sobre el nivel del mar. Después de hilvanar dos derrotas en la semana, una por la Copa con Unión Española (1-0) y otra por el torneo Final con Gimnasia (2-1), Bauza aceptó que es “lógico que existan comparaciones con Pizzi” (Juan Antonio, su antecesor), pero aseguró que “existe un excesivo interés por marcar siempre lo que está mal, cuando hay algunas cosas que se hacen bien”.

“En el fútbol argentino todos estamos más o menos iguales y nos pasan cosas parecidas. No siento que me apunten a mí exclusivamente, porque también lo hacen con otros técnicos de la trayectoria de Carlos Bianchi o Ramón Díaz”, puntualizó el DT de 56 años, y agregó: “A mí no me gusta meter excusas, pero el gran problema de la doble competencia es que no hay tiempo para trabajar”. “El viernes recién estaremos volviendo de Ecuador para empezar a preparar inmediatamente el encuentro con Tigre por el campeonato local. Y así todas las semanas hasta el final de la temporada. Por eso es inevitable que además aparezcan las lesiones”, comentó el técnico del campeón argentino y ex conductor de Liga de Quito sobre las lesiones de los defensores Mauro Cetto y el colombiano Carlos Valdez. San Lorenzo, cuarto en el Grupo 2, necesita una victoria para mantener la ilusión de clasificarse a los octavos de final de la Copa.