El técnico de Uruguay, Oscar Tabárez, ya se aseguró la presencia de Luis Suárez, su máxima estrella y goleador, en el decisivo partido de mañana frente a Inglaterra, y ahora busca el o los comodines que desde el centro del campo puedan frenar la potencia inglesa.

Inglaterra “no cambia su forma de jugar más allá de los nombres que integren el equipo”, dijo Tabárez. La selección de Roy Hodgson “tiene atacantes muy veloces y de gran potencial técnico. Nosotros intentaremos limitarlos y estar muy atentos a su juego aéreo”.

Tabárez tuvo una referencia especial para Steven Gerrard, compañero de Suárez en el Liverpool, de quien dijo que es el “termómetro inglés” a controlar. Por eso, encontrar un jugador que anule o al menos controle las asistencias de Gerrard es el gran objetivo.

El habitual mediocampo uruguayo, donde la entrega para recuperar rápidamente el balón es marca registrada, estuvo desconocido ante Costa Rica. Tabárez analiza el ingreso de Alvaro González para jugar sobre Gerrard y, además, Nicolás Lodeiro, que puso un poco de claridad en el segundo tiempo frente a los costarricenses, sería titular en lugar de Walter Gargano, dando más juego ofensivo a los celestes, al igual que los ingleses, obligados a ganar.

En Inglaterra, el debate sobre el lugar en el campo que ocupó Wayne Rooney en el choque frente a Italia, muy volcado sobre la izquierda, obligó al veterano Frank Lampard a defender la idea del entrenador Hodgson. “Empezamos de forma brillante, con un buen fútbol de ataque. Hubo mucho de positivo en el partido. Lo único malo fue que no ganamos”, dijo el volante del Chelsea. “Lamentablemente, tenemos el hábito de centrarnos en un solo jugador durante cada Mundial, cuando el que ha estado involucrado ha sido el equipo. Tenemos que mirar hacia adelante ahora y lograr los puntos que nos quedan. Mantener lo bueno y mejorar en lo negativo. Hay que ganar los partidos”, agregó. “La derrota fue mala suerte. Hicimos cosas nuevas y el jueves (por mañana) lo vamos a intentar de nuevo.”