El director técnico de Boca, Rodolfo Arruabarrena, adelantó ayer en relación con la semifinal de la Copa Sudamericana frente a River que se viene “una linda eliminatoria” y que “los dos están parejos”. “Estamos llegando a una última etapa –prosiguió– y a todos nos pueden pesar la cabeza y las piernas. La cabeza va a jugar, hablo por experiencia propia, yo cuando jugaba sabía cómo estaba de la cabeza.” Según el entrenador, “primero quedan dos partidos de liga y a ellos, tres. Hay que ver cómo llegamos. River es vertical, juega con ataque respaldado por sus laterales y volantes. Pero nosotros tenemos virtudes, le podemos hacer daño en la pelota parada”.

“A todos nos llegan –continuó–. La manera de jugar de River provoca que en algún momento tenga riesgos defensivamente. Es normal, River y también nosotros sufrimos con las pelotas cruzadas.”

En declaraciones a Radio La Red, Arruabarrena pidió “que no llueva. No sé qué dirá el pronóstico, pero nosotros queremos cancha seca. Venimos jugando todos los partidos con agua y a esta altura hay que cuidar a los futbolistas”. Consultado sobre los árbitros, el director técnico señaló que para él “da lo mismo cualquiera. Mientras puedan, que pasen inadvertidos. El que se equivoca, se equivocará como todos. Hay que bajar los decibeles con los arbitrajes, a veces les metemos demasiada presión”.

Al preguntársele si quería jugar una semifinal con River, expresó que “el objetivo era la Copa Libertadores. Después, tanto Estudiantes como River eran durísimos”. Respecto de su equipo, destacó: “Los chicos han aprovechado su oportunidad y deben seguir creciendo. El caso de Chiqui (por Claudio Pérez) es un ejemplo. Los jugadores me están demostrando personalidad. Más o menos los conocía a todos, no me gusta dar nombres, alguno me ha sorprendido gratamente”.

El primer partido de la semifinal será el jueves 20, a las 20.45, y la revancha será una semana después, a la misma hora, en el estadio Monumental.