Lionel Messi jugará hoy frente a Betis su partido 500 con la camiseta del Barcelona, e ingresará al selecto grupo de seis futbolistas que lo consiguieron, entre ellos Andrés Iniesta, actual capitán del equipo catalán. El rosarino llegó a Barcelona en 2000, con apenas 13 años, y desde 2004 jugó 499 partidos oficiales con el primer equipo, marcando 424 goles. El argentino es, junto a Iniesta, el jugador más ganador de la historia del club, con 26 títulos. Desde su debut oficial en 2004, Messi obtuvo siete títulos de liga, tres Copas del Rey, cuatro Champions League, seis Supercopas de España, tres Supercopas de Europa y tres Mundiales de Clubes.

El capitán del seleccionado nacional, que se recuperó de una lesión ligamentaria en la rodilla antes del Mundial de Clubes de Japón, en el que fue una de las figuras de su equipo para ganarle la final a River, será titular hoy ante Betis, por la decimoséptima fecha de la Liga.

Con un partido menos que el resto de sus competidores por haber participado del Mundial de Clubes, Barcelona lidera la tabla de posiciones junto a Atlético de Madrid, con 35 puntos.

Los catalanes afrontan este duelo como un desafío doble: batir el record de goles marcados en un año (están a dos de los 178 que fijó el Real Madrid en el 2014) y afianzarse en la cima.

El Betis, que regresa al Camp Nou tras un año en segunda, se encuentra en una zona cómoda de la tabla, a partir del rendimiento que ha conseguido en condición de visitante. En las últimas cinco visitas al Camp Nou el Betis ha perdido y el último resultado positivo lo logró en la temporada 2006-07 (1-1).

Después de ganar el Mundial de Clubes, el equipo catalán presentará ante su público los cinco trofeos que obtuvo en este 2015 (Liga, Copa del Rey, Champions League, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes), con el ánimo no solo de brindar su último triunfo del año, sino revestirlo con el record de goles en un año, cuya marca ahora (176) el equipo de Luis Enrique la tiene a dos tantos para igualarla.

Al margen de todos estos números, al Barcelona se le presenta una gran oportunidad de no dejar escapar más puntos y mantenerse en lo más alto, que sigue teniendo debido al tropiezo la semana pasada del Atlético de Madrid en el campo del Málaga (1-0). Barcelona, que gozaba de una cómoda ventaja, perdió cuatro puntos seguidos con dos empates (Valencia y Deportivo) antes de viajar a Japón. Por su parte, Real Madrid recibirá hoy a Real Sociedad.