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No tenían ya pocos problemas River y Manuel Pellegrini para afrontar esta primera final de la Copa Sudamericana que los visitantes del Deportes Cienciano de Cuzco, que vienen con ánimo de banca, duplicaron la apuesta incluyendo a los fraternales enemigos, los de Boca, en una disputa que durará más de una semana y que comprenderá no sólo el partido de esta noche, sino la Intercontinental del domingo y la segunda final, el viernes 19 en un escenario peruano todavía por determinar.
Tenía ya suficientes problemas Pellegrini con un plantel tan escaso que lo obliga a improvisar al tercer arquero como jugador de campo para completar el banco de suplentes que prefirió esquivar esta provocación.
El presidente del Cienciano, Juvenal Silva, avivó ayer el sentimiento al anunciar que pedirá a los hinchas de Boca su aliento. “Vamos a ir al barrio de la Boca para hablar con los hinchas para que nos apoyen y hagamos una linda hinchada en el Monumental con los peruanos radicados en Buenos Aires”, dijo el presidente del club cuzqueño. Silva prometió que regalará entradas a los que vayan...
En River dijeron no estar interesados en las maniobras demagógicas del dirigente peruano, bastante ocupados en sus propias cuitas. Para un partido como el de esta noche, en el que el equipo precisa ganar –y por una buena diferencia– para afrontar con otra comodidad la segunda final probablemente en Arequipa, el entrenador debió improvisar no sólo un equipo de emergencia, sino también un banco acorde.
La lista de bajas ya fue consignada en demasiadas oportunidades, aunque ayer se confirmó la última, la del defensor Eduardo Tuzzio, aquejado de una molestia en el aductor izquierdo, lo que obliga al técnico a formar una defensa que abre espacio a la duda. La buena noticia es que, pese a que continúa con la molestia en el aductor derecho a cuestas, Marcelo Gallardo jugará desde el arranque.
Las limitaciones de Pellegrini a la hora de conformar el conjunto son tales que el arquero Alejandro Saccone integrará el banco de suplentes como jugador de campo y el chileno Marcelo Salas, casi repuesto de una distensión en el gemelo derecho, estará entre los 18 pero no actuará; recién estaría listo para la segunda final. Completarán el banco el arquero Germán Lux, el defensor Lucas Mareque, el mediocampista Daniel Ludueña y los delanteros Darío Husain y Alejandro Domínguez.
No todas son pálidas: Horacio Ameli quedó habilitado para jugar el partido decisivo por la Copa el próximo viernes 19 como visitante, pero, tal como se preveía, sus compañeros Guillermo Pereyra y Diego Barrado fueron suspendidos por la Conmebol por tiempo indeterminado. Las sanciones para Ameli, Pereyra y Barrado son consecuencia del accidentado cotejo que se jugó en el estadio Morumbí, cuando River ganó en el desempate desde el punto del penal y eliminó al San Pablo.
Ameli fue castigado por una fecha y por eso se perderá el partido de hoy. Esa fue la razón por la cual el zaguero actuó el domingo como titular ante Talleres, por el torneo Apertura, marcando el tanto del empate. La pena fue más leve porque lo expulsaron por doble amarilla como resultado de una intervención violenta durante el juego. En cambio, las sanciones son todavía indefinidas para los mediocampistas Pereyra y Barrado porque ellos sí recibieron tarjetas rojas por participar de la batalla campal entre los futbolistas.