Emmanuel Francés, el agresor. La jueza agredida, María Eugenia Rocco.

En la semana en la que se realizó un paro nacional de mujeres, en el marco de una nueva movilización de NiUnaMenos, en la que miles de hombres y mujeres se reunieron en diferentes plazas de todo el país, unidos por un mismo mensaje: que se ponga un freno a la violencia que padecen a diario las mujeres, y que la sociedad tome conciencia de ello, la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) decidió castigar severamente la agresión del jugador de Deportivo Merlo Emmanuel Francés a la árbitro asistente María Eugenia Rocco. “Se trata de un claro hecho de violencia de género”, manifestó la Aprevide en un comunicado en el que explicó su decisión de prohibirle al futbolista ingresar a las canchas para asistir a los espectáculos deportivos de la Provincia de Buenos Aires, hasta tanto la UFI (Unidad Funcional de Investigación) y el juzgado N° 11 del Departamento Judicial de Quilmes se expida de forma definitiva sobre el caso.

La agresión ocurrió durante el partido de la Primera C entre Argentino de Quilmes y Deportivo Merlo, que había finalizado con victoria de los locales por 2-1, y según la denuncia en la Aprevide “Francés propinó a Rocco con un golpe de puño cerrado en la nuca”.

En el video que mostraron algunos medios, se lo ve al jugador arrojando una pelota al tumulto de jugadores y referís. De hecho, la versión de los hechos del integrante del conjunto del Ascenso, fue que lanzó la pelota, pero que nunca tuvo la intención ni le pegó a la autoridad femenina. La causa está caratulada como “lesiones”.

Rocco no quiso iniciar acciones penales contra el volante, por lo que la Justicia solicitó una ampliación del informe para que se inicie una contravención por infracción a la Ley Provincial del Deporte 11.929.

“Del mismo modo en que trabajamos a diario para sacar a las barras bravas y tener un fútbol en paz, como nos piden la Gobernadora (María Eugenia) Vidal y el ministro (Cristian) Ritondo, no podemos ignorar una situación como ésta”, aseguró Juan Manuel Lugones, titular de la Aprevide. “No sólo es condenable por tratarse de la agresión de un jugador a una autoridad del partido, sino porque esa autoridad, además, es mujer, en un hecho que se vincula con la violencia de género y que nosotros repudiamos enfáticamente”, subrayó el funcionario.