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A poco de cumplir veinte años como jugador profesional, Carlos Fernando Navarro Montoya asegura que el actual “es el mejor momento” de su carrera deportiva, a partir de que el arquero de Independiente siente un gran reconocimiento “por parte de todos los hinchas y también de los colegas”.
Cuando faltan pocas horas para el trascendental encuentro que su equipo disputará con River por el Torneo Clausura, el jugador le concedió una entrevista a Página/12 en la que afirmó que se encuentra “de vuelta de muchas cosas y con el objetivo de terminar su carrera en un equipo grande”. Navarro Montoya señaló también que la Selección argentina es “la gran asignatura pendiente” y que hará todo lo posible para que el entrenador, Marcelo Bielsa, lo convoque de cara al próximo compromiso ante Ecuador por las Eliminatorias de Alemania 2006.
En relación a José Luis Chilavert, con quien protagonizó una serie de cruces verbales durante la década pasada, el experimentado futbolista aseguró que no le guarda “ningún rencor y tomaría un café con él”. Sobre Independiente, consideró que “tiene jugadores como para dar pelea en todos los frentes” y que, “si bien todavía falta mucho por jugar, ganar la Copa Libertadores no es un imposible”.
–¿Cómo evaluás este momento de tu carrera deportiva?
–Sin duda, como el mejor. Me siento muy feliz. Disfruto mucho cada partido, cada entrenamiento, las concentraciones, las charlas técnicas. Estoy atajando bien, y ahora tengo el reconocimiento de los hinchas de todos los clubes y también el de mis colegas. Vivo esta etapa como una revancha personal después de algunos sinsabores que me dio el fútbol. Estoy contento con esta oportunidad que se me presentó en Independiente y espero afirmarme en este club.
–¿Cuáles fueron esos sinsabores a los que te referís?
–No viene al caso mencionarlos de forma puntual a cada uno de ellos, pero lo que quiero decir es que después de tantos años como jugador acumulás muchas broncas, malos resultados, campañas irregulares y también actuaciones flojas. Pero tuve además épocas lindas, y creo que ésta es la mejor de todas. Hago lo que me gusta, estoy entero físicamente y en un buen momento dando lo mejor de mí.
–El hincha de Independiente está muy ilusionado con la Copa Libertadores. ¿Creés que pueden ganarla?
–Tenemos que ir despacio, partido a partido. Prometer un título a esta altura sería una irresponsabilidad, pero el deseo del hincha existe. Este club es un gigante dormido, y este equipo tiene grandes jugadores que pueden despertarlo. Independiente tiene que estar en lo más alto, a veces es difícil entender que haya pasado por rachas tan malas. Cuando me incorporé a este plantel y vi en las primeras prácticas el rendimiento de algunos jugadores, me costaba entender por qué le había ido tan mal a Chiche (Osvaldo) Sosa como entrenador.
–¿Qué jugador te sorprendió especialmente por sus condiciones?
–Me gustaron mucho Manso, Leonel Ríos y Losada, creo que tienen un gran futuro como jugadores. Además de Hugo Morales, que tiene unas condiciones técnicas impresionantes y que está vigente. Es un jugador que tiene cuerda para rato. Todavía puede darle mucho al fútbol.
–¿Cuál te parece que es la cualidad más importante que tiene este equipo de Pastoriza?
–Creo que nos va a ir bien si conseguimos que los rivales nos dejen espacios. Tenemos jugadores hábiles y rápidos y creo que allí podemos hacer la diferencia con respecto a los demás. Pero todavía estamos en formación. Necesitamos un poco más de tiempo para alcanzar nuestro nivel más alto.
–¿Te gusta cómo se juega en el fútbol argentino?
–Sí. Para mí este es uno de los campeonatos más competitivos del mundo. En este torneo, además, se están marcando muchos goles y creo que se debe a que existe una verdadera vocación ofensiva por parte de la mayoría de los equipos de Primera División. El jugador argentino tiene un gran nivel deportivo y grandes condiciones anímicas; eso es muy apreciado en el exterior. Por eso creo que mientras haya jugadores argentinos, un campeonato no puede resultar aburrido.
–¿Qué diferencias notás entre el fútbol actual y aquel de mediados de los años ochenta donde vos te iniciaste?
–Decir que antes se jugaba mejor que ahora es cosa de viejos. Siempre hubo buenos y malos jugadores, no creo que cuando yo empecé en Vélez se jugara un fútbol mejor al actual. No veo grandes diferencias; el fútbol es uno solo. Por suerte.
–Muchos dicen que actualmente hay muchas más presiones, sobre todo económicas...
–El tema de la presión en fútbol es algo muy trillado. El jugador de fútbol, sobre todo el de Primera División, es un privilegiado. En el fútbol hoy está todo muy mercantilizado y mediatizado, lo acepto, pero hace unos años te rompías los ligamentos y no jugabas nunca más. Con lo avanzada que está la medicina deportiva te pueden recuperar de una lesión como esa en quince días. Eso es algo asombroso que hace veinte años era imposible. Además, el jugador hace lo que le gusta y en los tiempos que corren eso es ya algo que hay que agradecer.
–Hace diez años te la pasabas polemizando con Chilavert. ¿Lo invitarías ahora a tomar un café?
–Seguro. Todas esas cosas que nos dijimos en aquella época están superadas. Chilavert es un grande y un referente muy importante para todos los arqueros jóvenes que están empezando. No tengo problemas con ningún colega, y la verdad es que a esta altura de mi carrera las polémicas me aburren. No tengo necesidad de protagonizarlas ni de discutir por pavadas. Mejor es que hablen de uno por lo que hago dentro de una cancha de fútbol. Lo demás no me interesa. De todo eso estoy de vuelta.
–¿Volverías a formar parte de un programa de televisión?
–Si es para hablar de fútbol a lo mejor sí. Pero para polemizar por cualquier cosa no. Es una etapa que ya superé.
–¿Te ves como entrenador en el futuro?
–Hace unos años hubiese contestado que no. Pero cada día disfruto más todo lo que se vive en el mundo del fútbol, y la verdad es que quiero seguir ligado a todo esto por muchos años. La mejor forma de hacerlo es siendo entrenador. Tengo muchas ganas de empezar el curso.
–¿Eso quiere decir que ya analizás la posibilidad de un retiro?
–Bueno, no. Creo que todavía puedo tirar unos añitos más. Tengo 38 años, y creo que todavía tengo cuerda para unos más. Antes del retiro me gustaría ganar algo con Independiente. Creo que ese puede ser un buen cierre. Ojalá pueda realizarlo.
–¿La Selección argentina sigue siendo la gran asignatura pendiente de tu carrera?
–Sí y trabajo todos los días para lograr que me llamen. Después de tantos años en el fútbol lo viviría como un premio. Espero que se me pueda dar cuanto antes. Si es contra Ecuador y por las eliminatorias, mejor, pero todavía ningún integrante del cuerpo técnico habló conmigo. Es un sueño que espero cumplir. Me haría muy feliz.
–¿Qué técnico te marcó a lo largo de tu carrera?
–Creo que el más importante fue Basile, que me hizo debutar en Vélez. Tuve la suerte de que me dirigieran grandes entrenadores como Menotti y Bilardo, con el cual tengo algunas diferencias pero lo rescato porque sabe mucho y es muy trabajador.
–¿Qué opinás del proceso que cumplió Carlos Bianchi en Boca?
–Todo lo que logró Boca fue por la personalidad que él le imprime a sus equipos. Tengo con él una gran relación, porque además lo tuve como compañero. Lo que más rescato de él es la humildad que tiene. Eso lo hace distinto a todos los demás.
–Además de una convocatoria a la Selección, ¿qué sueños tenés y te gustaría realizar antes de retirarte?
–Me gustaría irme con un título. Pero mis sueños son más concretos. Levantarme y disfrutar día a día del fútbol, que a pesar de todo sigue siendo un juego: ese es el máximo anhelo que tengo.

Entrevista: Leonardo Castillo.