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La propuesta “superofensiva” que espera plasmar Marcelo Bielsa con la Selección Argentina en la cancha precisa que Pablo Aimar, Juan Pablo Sorin, Andrés D’Alessandro, César Delgado, Hernán Crespo y Mariano González ronden el área de Ecuador, el rival de esta quinta fecha de las Eliminatorias, que históricamente sólo pudo ganarle dos partidos al equipo nacional. Algunos se lamentan porque jugadores como Javier Saviola, Juan Román Riquelme o Carlos Tevez no puedan integrar semejante armada, porque estarán en el banco de suplentes. Aunque quedaban por vender 27 mil localidades, la re-caudación superaba los 540 mil pesos.
Las discusiones tendrán que ver luego con el resultado, con los pedidos de las tribunas –la Almirante Brown pedirá a gritos a Saviola, la Centenario reclamará a Riquelme o a Tevez, o a los dos– con lo que genere en la cancha el equipo argentino, cuyo poder de convocatoria también se juega un partido importante, después de la escasa adhesión que logró en el último partido jugado en el Monumental, ante Bolivia, en noviembre.
“Vamos a jugar siempre al ataque, con la iniciativa, la pelota y el dominio territorial en nuestro poder, como siempre propone Bielsa –se embanderó Roberto Ayala, el capitán del equipo–. No hay que subestimar a ningún rival y todos los partidos son complicados, pero creo firmemente en la potencia argentina. Eso sí: Ecuador está dirigido por un técnico que es inteligente, ve muy bien al fútbol. Con sus jugadores va a venir a buscar un punto, con la idea de llevarse el empate. Sin dudas, están motivados porque para ellos será algo histórico lograrlo.”
Con Ayala estuvo de acuerdo Juan Pablo Sorin, uno de los futbolistas que Bielsa espere que llegue a posición de gol. “Vamos a presionar a Ecuador en el campo rival con muchas variantes para intentar quebrar su rígida defensa. Eso será clave –opinó el lateral–. No creo que salga un partido abierto, sin muchos espacios. Me preocupa poco cómo juegue Ecuador, me interesa cómo lo hace la Argentina, que sea superior para ganar, con (Diego) Maradona en las tribunas y la gente contenta.” Según Hernán Crespo, “más allá de los nombres, este equipo siempre es agresivo”.
Frente a semejantes promesas superofensivas, el entrenador de los ecuatorianos, Hernán Darío Gómez, anticipó con gran ironía que su planteo ante “el cuco albiceleste”, como lo llamó, será “ultradefensivo”, porque relativizó el hecho de que jugar con un 4-4-1-1, como va a parar al equipo, tenga que ver con un planteo conservador. “Es que mis delanteros juegan mejor cuando vienen desde atrás”, graficó.
“Siempre fui hincha del fútbol argentino. Le temo porque lo conozco”, reconoció Gómez, quien adelantó que su conjunto se va a “defender con el balón. En Quito, Argentina nos ganó 2-0, pero le metimos cuarenta mil jugadas de gol. Sé ordenar un equipo para enfrentar a los mejores del mundo, porque tengo un equipo con buen trato de pelota”. El entrenador colombiano señaló que la Argentina deja mucho espacio en la defensa, claros que sus jugadores pueden aprovechar “yendo y viniendo por los laterales”. Alrededor de 500 ecuatorianos estarán hoy en la cancha, llegados en cuatro aviones charter desde Guayaquil y Quito.