DEPORTES › DIEZ OBSERVACIONES SOBRE LA DEFINICION DEL CLAUSURA
La ecuación del asado
Pastoriza y Chacarita se trajeron un punto de Núñez y dejaron a River, siempre puntero, a solas con el compromiso de jugar el partido del campeonato, ante Racing, el próximo domingo. Gimnasia está pendiente, Boca se autoexcluye, y en el fondo de la tabla tampoco nada está decidido.
Producción: P.V. y A.G.
1 El segundo gol de Ariel Rosada habilitó la broma que venía preparándose desde el cierre incompleto de Racing-Boca, a propósito de que el técnico del equipo de San Martín es el inefable José Omar Pastoriza, que en su estrategia de grupo concede fundamental importancia a la parrilla y el carbón: Chacarita le escupió el asado a River. Y algo de eso hubo, no sólo porque el líder jugó uno de sus peores partidos en el torneo, sino porque ese tanto le hizo perder una gran oportunidad para quedar muy cerca de su trigésimo título en el profesionalismo.
2Con la derrota de Boca –que se puede consignar aunque falten minuto y medio y quede un penal sin rematar– los planes matemáticos de River se cumplían a la perfección. Racing alcanzaba a su vencido en el nivel de los 28 puntos, dos menos que los que logró ya Gimnasia, y esa alquimia de resultados depositaba a River en una catapulta: si vencía a Chacarita, el puntero sacaría seis puntos de ventaja sobre Gimnasia (descontando también que se le dará por ganado el partido del miércoles pasado en La Plata) cuando quedan exactamente cuatro fechas y, por lo tanto, doce unidades en juego. Eso y decir que River empezaba a gritar ¡campeón!, era exactamente lo mismo.
3Por eso Rosada y Chacarita le escupieron el asado. River quedó con 34 puntos, cuatro más que Gimnasia. Es cierto que esas cuatro unidades también impresionan en el marco de lo que queda jugar. No sería nada descabellado, por un lado, que no pudieran descontarle esa ventaja con tan poco margen; por el otro, si River venció a Boca y a Gimnasia, dos de sus tres escoltas, en sus canchas, no sería del todo justo que perdiera el campeonato. Pero la ecuación del asado alteró, también, este análisis.
4River puede haberle ganado a dos de sus tres escoltas; pero le queda un tercero. Es Racing. Y no es un Racing cualquiera. No porque se haya superado llamativamente en las últimas fechas, aumentando el volumen de juego, sino porque su cabalgata de las últimas fechas ha entusiasmado a plantel e hinchada. También le ganó a Gimnasia en La Plata, no pierde desde la décima fecha, y la victoria sobre Boca ha servido también para ponerlo en posición expectante respecto del título, que en Avellaneda despierta interés particular: ¿qué no darían los jugadores por conseguir el bicampeonato, si ya con el título del Apertura pasado quedaron en la historia del club? En condiciones normales, descontar seis puntos sobre doce en juego suena a quimera. En este caso no, porque Racing visita a River el próximo domingo.
5Por eso, no hay problemas en catalogar al clásico de la semana próxima en el partido del campeonato. Si River gana, mantendrá al menos su ventaja de cuatro puntos, pero ya quedarán solamente nueve puntos en discusión. Si Racing gana, habrá achicado la ventaja a tres puntos, y dependerá de Gimnasia –que recibe a Argentinos– arrimarse a un solo puntito de la puntita. Un empate será más lamento que consuelo para ambos equipos, aunque a River puede serle algo más útil en función de cómo le vaya a Gimnasia y también a Boca, que visita a Banfield. Aunque el Maestro Tabárez haya anunciado que su equipo está abajo de la competencia.
6Mientras desarrolla su pelea por el título, Gimnasia mantiene cada vez más firmes sus aspiraciones de llegar a la Copa Libertadores del año que viene. Con su victoria ante Lanús y el empate de San Lorenzo en Rosario, los platenses sacaron cinco puntos de ventaja en la lucha por la última plaza, aunque San Lorenzo todavía debe completar el partido que perdía 1-0 con Argentinos. Colón, el otro aspirante, dio un paso en falso al empatar ayer y ya está a seis unidades de Gimnasia. Racing y River (yaclasificados) y Boca (se asegura su lugar con cinco puntos) ocupan los otros tres lugares.
7Con su victoria ante Banfield, Chicago dio un paso decisivo para mantenerse en Primera. Con 44 puntos en la temporada, el equipo de Mataderos necesita apenas dos unidades para escaparle al descenso directo y con cinco puntos evita incluso la promoción, sin importar los restantes resultados. Claro que también puede llegar a la ansiada salvación gracias a la debacle de sus rivales. Si Unión no logra siete puntos o Argentinos no obtiene nueve (tiene suspendido el partido ante San Lorenzo), el conjunto de Francisco Ferraro asegurará su permanencia sin necesidad de jugar. Belgrano ya no tiene chances de superarlo.
8La derrota en el clásico ante Talleres dejó a Belgrano al borde del descenso directo. Los cordobeses ya están condenados al menos a jugar la promoción y sólo pueden llegar a alcanzar a Unión, Argentinos y Banfield. Con doce puntos en disputa, Belgrano debe descontarle seis unidades a Unión y cuatro a Argentinos, que pueden ser siete si los de La Paternal ratifican su triunfo parcial ante San Lorenzo. Para tener chances de alcanzar a Banfield, necesitan que los del Sur saquen menos de tres puntos.
9Si bien matemáticamente hay más chances, entre Lanús, Unión y Argentinos seguramente estará el segundo descendido. Lanús es el más aliviado ya que suma 132 puntos en las tres temporadas, siete más que Unión y nueve más que Argentinos. Los de La Paternal, que hoy descenderían, son los más comprometidos aunque en las últimas jornadas le vienen descontando ventaja a sus adversarios. Además, si aseguran el triunfo ante San Lorenzo superarán a Unión en la tabla.
10A cuatro partidos de que se completen los 114 encuentros de las tres temporadas, Independiente todavía no consiguió asegurar su permanencia. El equipo de Américo Gallego necesita sumar al menos cuatro unidades o que Lanús sume menos de diez puntos para evitar la promoción. Claro que si bien en este torneo no parece haber demasiados inconvenientes, el tema se complica para el siguiente. Al perder los 61 puntos de la temporada 99/00, que se eliminarán en el próximo torneo, Independiente se ubicaría apenas arriba de Unión y Central, con los mismos puntos que Belgrano. Así que si los santafesinos y cordobeses descienden –algo perfectamente posible–, el equipo de Gallego iniciaría el torneo en zona de descenso directo.